
A comienzos de esta semana, el diario francés Les Echos dio a conocer que el Gobierno de Francia podría aplicar nuevos impuestos a operadoras para 2030 de carreteras tras un fallo del tribunal administrativo de la nación que lo permitía. Con esta nueva tributación, el Estado galo podría obtener entre 2.000 y 3.000 millones de euros adicionales a los impuestos ya existentes. A esta noticia se sumaba, además, el comunicado del Ministerio de Transporte francés que pedía a estas mismas operadoras la reducción de los peajes para los viajes de verano, de al menos el 10% para los hogares que usan vales vacacionales -hasta cinco millones de personas emplean estos bonos en el país-.
Estas noticias afectaban de manera más directa a tres compañías: Vinci, Bouygues y Eiffage -este último uno de los valores de Tressis Cartera Eco30, el fondo de inversión asesorado por elEconomista.es-, que, en el caso de Vinci y Eiffage -el 16% de los ingresos de la francesa provienen de su negocio de concesiones- sufrían importantes retrocesos en bolsa este lunes. La compañía naranja corregía más de un 5% en tan solo una sesión, su peor jornada desde finales de noviembre del 2021. Con esta caída, sus ganancias anuales quedan reducidas al 3,1%, aunque su potencial alcista crece hasta el 32%, pudiendo alcanzar sus títulos el precio objetivo de 127,43 euros.
Pese a lo que pueda suponer este nuevo impuesto para Eiffage -la segunda mayor posición sobre la compañía la posee el Fondo de Inversión Colectiva de la propia empresa-, por el momento, el mercado no ha realizado ningún tijeretazo a sus estimaciones y siguen proyectando que la empresa francesa alcanzará por primera vez en toda su historia los 1.000 millones de euros de beneficio neto. De hecho, desde comienzos de ejercicio, las previsiones del mercado no han hecho más que aumentar y sus ganancias netas serán un 10% superiores a las que se esperaban a comienzos de año, de 943 millones de euros.
Sus ganancias seguirán engordándose durante los próximos ejercicios, hasta rondar los 1.400 millones de euros en 2026. "La perspectiva para 2023 es positiva y la empresa busca un crecimiento continuo en EBIT tanto en su negocio de Contratación como en el de Concesiones. En la división de Contratación esperan el mayor crecimiento manteniendo una estricta selectividad de proyectos en un entorno que continúan impactando el aumento de los costes. En Concesiones, el grupo asume la vuelta paulatina al tráfico aeroportuario normalizado", señalan desde JP Morgan.
Por sus beneficios se vuelven a pagar multiplicadores de beneficio por debajo de las 10 veces, adquiriéndose a un PER (veces que el beneficio queda recogido en el precio de la acción) de 9,3 veces sobre precios actuales, lo que la convierte en una de las firmas más asequibles por esta ratio entre sus principales competidoras. Con una de las mejores recomendaciones de compra de su sector, por primera vez desde 2012, la rentabilidad de su dividendo alcanza el 4% en 2023.