
Marco Patuano ha comenzado su segunda etapa en Cellnex, ahora como consejero delegado, con un gran objetivo por encima de los demás y es conseguir el grado de inversión por parte de S&P. Por eso, el horizonte en el que ahora mismo se fija el mercado es el próximo año y medio ya que esperan lograrlo antes de que acabe 2024.
Esto es clave porque automáticamente se reduciría el coste de financiación para una empresa que en la próxima década va a seguir necesitando pedir dinero prestado para costear los vencimientos de su deuda, las inversiones de expansión y de mantenimiento y los programadas de BTS (build to suit) que tiene firmados, además de hipotéticas operaciones para seguir consolidando el mercado que lidera.
Este curso no tiene vencimientos en el calendario, pero sí inversiones que realizar. Según las estimaciones de UBS éstas se quedarán ligeramente por encima de los 2.700 millones de euros mientras que la generación de caja prevista se sitúa en 1.610 millones. Sin embargo, actualmente cuenta con hasta 1.100 millones en liquidez y 3.300 millones más en líneas de crédito no dispuestas. Por tanto, todavía le sobrarían más de 3.000 millones para terminar el curso sin problemas.
De cara al próximo año, sí que tiene que hacer frente a vencimientos por más de 1.300 millones (577 ya los ha refinanciado para 2029), además de unos 2.500 millones en inversión, según UBS. Un total de 3.250 millones de los que 1.900 millones los puede asumir con la generación de caja prevista y el resto, unos 1.350 millones, con la liquidez que queda disponible. Por tanto, a priori, parece que la compañía no tendrá problemas para asumir sus obligaciones financieras antes de que llegue el grado de inversión ya que contaría también con los activos que tiene que vender en Francia por competencia (unos 900 millones).
"Dada la complejidad del entorno macro, muchos están advirtiendo del riesgo de invertir en una empresa que tiene un apalancamiento de 7,5 veces; sin embargo, pensamos que el desapalancamiento orgánico, sobre todo después de la fuerte inversión en BTS del año pasado, unido a las ventas que está obligada a hacer en Francia, les permitirá lograr ese grado de inversión el próximo año", explican desde UBS. "Esto coincidirá con un mejor entorno de tipos, que empezarán a normalizarse", agregan.
Hay que recordar que, aunque el año pasado Cellnex cerró el ejercicio con una deuda 7,5 veces superior a su ebitda, de cara a este año la previsión del consenso de analistas que recoge FactSet ya lo sitúa en las 6,2 veces, por debajo del nivel clave de las 7 veces que S&P tiene como condición para retirar el grado de especulación que pesa sobre ella.
De los 16.750 millones de deuda neta que tiene ahora mismo, el 77% está a tipo fijo, por lo que el riesgo que ha suscitado la subida de los tipos de interés realmente está limitado. "Por eso la compañía cree que no tendrá que volver a refinanciar nada hasta 2027, más allá de los créditos revolving que sí que tendrán costes algo más elevados y podrían elevar el coste de financiación hasta el 2,7% aproximadamente desde el 1,8% actual", explican en UBS.
Sin embargo, desde la entidad suiza creen que una vez logre el grado de inversión, los bonos tradicionales pasarán a ser el instrumento preferido para financiarse, aunque ahora en el mercado secundario rondan el 6% de rentabilidad exigida. "Conseguir el grado de inversión reducirá el coste de la deuda y los riesgos derivados de ello así como poder aprovechar las oportunidades que surjan de seguir creciendo inorgánicamente", concluyen en UBS.
Aunque este año recupera un 14%, todavía sigue muy penalizada en el parqué, lejos de sus máximos históricos. Ninguna de las firmas de inversión que la siguen recomienda vender unos títulos que ofrecen un recorrido alcista del 40%, hasta casi los 50 euros.