
El mercado solo escucha lo que le interesa. Esa es la conclusión que extrae el presidente del Queen's College, Mohamed El-Erian, del desempeño de la bolsa estadounidense en la última semana, después de las declaraciones de la Reserva Federal del pasado miércoles. El analista de los bancos centrales subraya así el peligro que conlleva para las bolsas que la Fed no sea suficientemente contundente en sus declaraciones públicas.
"El mercado no escuchó las declaraciones ponderadas [de Jerome Powell, presidente de la Fed]. Solo oyeron que tan pronto como este mes se va a reducir el ritmo de las subidas de tipos [de interés]", resumía El-Erian en declaraciones a un programa de la CNBC.
En la misma línea, el experto publicaba un artículo de opinión en Bloomberg el que recreaba una conversación ficticia entre el mercado y Powell. En ella, el líder de la Fed intenta una y otra vez advertir a las bolsas de que aún queda mucha batalla para alcanzar el objetivo de inflación del 2%, mientras los mercados se apoyan en la reducción del ritmo en las subidas de tipos de interés y las expectativas de que una posible recesión sea breve y de baja intensidad.
"Una vez más, la comunicación de la Fed ha contribuido a una volatilidad indebida en los mercados", acusaba el asesor de Allianz en una intervención en Bloomberg Television. Considera que Powell "no hizo retroceder de ninguna manera contra lo que ya era un repunte significativo en los mercados. Aunque dijo otras cosas, incluyendo una advertencia sobre la inflación, no se dio cuenta de dónde estaban los aspectos técnicos de este mercado".
Tampoco las casas de análisis compartieron la euforia de las bolsas del miércoles. En JP Morgan auguran un desplome de hasta el 12% en el S&P 500 en el primer semestre de 2023 por el retroceso de las circunstancias macroeconómicas y una política monetaria "aún más restrictiva", mientras en Morgan Stanley prevén una afectación sobre los beneficios corporativos que podría llevar al selectivo estadounidense a una caída de doble dígito porcentual.
Powell declaraba el miércoles en su discurso pronunciado en la Brookings Institution que "tiene sentido frenar el ritmo de las subidas de tipos" en la reunión de diciembre, apuntando a la subida de 50 puntos básicos por la que ya apostaban las bolsas, si bien añadía que "harán falta muchas más pruebas para considerar que la inflación está bajando". Dejaba entrever así la posibilidad de que el incremento del precio del dinero se frene, aunque es probable que permanezcan altos durante más tiempo.
El-Erian cree que el banco central llevará los tipos por encima del 5% el próximo año, algo con lo que coincide también la herramienta de análisis FedWatch de CME Group. En este sentido, el experto subraya que la Reserva Federal tiene que ser "muy cuidadosa" a la hora de comunicar sus decisiones en política monetaria, de cara a reducir la volatilidad en los mercados.
Precisamente, tras el informe laboral de EEUU publicado el viernes, los inversores volvían a temer que la Fed no desacelere su ritmo de subidas y arrancaba la sesión bursátil con leves caídas que se fueron moderando con el paso de las horas. "La inmediata reacción de los mercados es deshacer algunos de los movimientos de precio que desató la intervención de Powell el miércoles", remarcaba El-Erian en Twitter, volviendo a poner el foco en que lo moderado de las declaraciones de Powell promueve la volatilidad bursátil.
El Comité Federal del Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) volverá a reunirse los días 13 y 14 de diciembre, su último encuentro programado para este año, donde el mercado ya espera una subida de tipos de solo 50 puntos básicos, después de que las últimas cuatro reuniones se hayan contado por alzas de 75 puntos en cada una de ellas, hasta el rango actual del 3,75% - 4%.