
El selectivo se recuperó en la recta final de la sesión gracias al apoyo de Wall Street, a quien la gripe porcina no le pareció tan grave. Es más, prácticamente cerró en máximos del día porque acabó en 8.777 puntos tras ceder el 1,25%. Y es que la enfermedad que se ha propagado desde México fue la excusa perfecta para la recogida de beneficios. Es más, el Dax alemán acabó con alzas del 0,42%.
"Cuatro animales son particularmente citados en Wall Street: los toros, los osos, los cerdos y las ovejas", contaba Alexander Elder en su famoso libro Vivir del trading. "Los cerdos son codiciosos, ávidos de ganancias. Son sacrificados cuando hacen trading para para satisfacer sus ansias. Ciertos cerdos compran o venden desde posiciones que son demasiado arriesgadas para ellos y van a la bancarrota al menor movimiento adverso", explicaba Elder definiendo los comportamientos de los actores del mercado.
"Cada día de apertura del mercado verá usted a los toros comprar, a los osos vender y a las ovejas y los cerdos pisoteados", concluía Elder.
Sesión de ida y vuelta
El Ibex 35 marcó mínimos del día en 8.633,8 puntos con la banca como principal lastre tras los resultados de Banco Popular, pero minutos antes del cierre llegó a tocar los 8.799,80.
Los inversores movieron un total de 3.954 millones de euros en todo el parqué español en una jornada en la que destacaron de nuevo las pérdidas de Iberia, que fue el peor del día con caídas del 5,92%. Telecinco, Sacyr e Indra fueron los únicos valores que acabaron al alza quedando sin cambios Criteria. (Un vistazo al Ibex 35, al Eco 10 y al resto del mercado)
Los alcistas, sin titubeos
"Buen patrón pese a las cesiones para el Ibex 35, especialmente considerando lo que acontece en unas bolsas occidentales que se han repuesto perfectamente de un nuevo intento de los bajistas de abrir brecha en lunes. La vela desplegada, en medio de un generoso volumen, es un martillo y aparece en plena directriz alcista de aceleración. No son jornadas como la de hoy las que deben llevarnos a concluir, a priori, que los alcistas titubean", señalaba Carlos Doblado desde Bolságora.