
Hace veinte años la burbuja de las puntocom estalló, pero fue una crisis bursátil que no impidió que los inversores consiguiesen gigantescos beneficios si invirtieron en las compañías adecuadas.
Desde que empezaron a cotizar a principios de siglo, Facebook se ha revalorizado un 782%, Alphabet un 6.778%, Microsoft un 818%... Son los principales ejemplos de cómo el desarrollo de Internet y del mundo digital ha sido una de las fuentes más importantes de rentabilidad en todo el mercado cotizado.
Ahora ha nacido una nueva idea, el metaverso, que podría revolucionar la era digital, al desarrollar un ecosistema que permitirá nuevas interacciones como nunca antes se habían concebido. Para explicar el metaverso se puede recurrir a una de las producciones cinematográficas que más éxito tuvo a finales del siglo XX: Matrix.
Metaverso, la gran apuesta de Mark Zuckerberg para reorientar el negocio de Facebook (ahora llamada Meta), es un entorno digital en el que los seres humanos podrán llevar a cabo interacciones en espacios virtuales. Dicho de otro modo: podremos conectarnos, con un dispositivo tecnológico como unas gafas de realidad virtual, a un entorno digital parecido al concepto de Matrix (sin el engorro, en principio, de que lo utilice una raza de máquinas inteligentes para esclavizar al ser humano). Ya se están empezando a plantear posibles aplicaciones al desarrollo del metaverso, como poder disfrutar de un evento deportivo desde la primera fila del estadio, o incluso dentro del terreno de juego, sin moverte de casa.
El desarrollo del metaverso promete nuevas oportunidades de negocio para distintas compañías del sector de la tecnología, que tendrán que desarrollar nuevas aplicaciones, hardware, baterías… etc, para poder sostener este nuevo universo. El inversor puede aprovechar estas oportunidades, y ya empiezan a surgir los nombres de las compañías que ganarán con este avance. Invertir directamente en las empresas que se verán beneficiadas es la única alternativa que tienen los inversores españoles, por las limitaciones que existen en Europa por parte del regulador.
"Hoy por hoy en nuestro país no se pueden comercializar, entre inversores minoristas, productos para invertir en el metaverso", explica Víctor Alvargonzález, director de estrategia de Nextep Finance. "Los inversores particulares no tienen permitido acceder a ETFs norteamericanos, que son los únicos productos realmente capacitados para invertir en el metaverso", recuerda.
Por ello, hay que buscar nombres propios en el parqué que se verán beneficiados por el desarrollo del metaverso. Desde Citi señalan algunas de estas firmas que se presentan como una buena oportunidad para aprovechar el crecimiento de este universo.
Quién se beneficiará y cómo
El banco estadounidense destaca cinco aplicaciones que irán de la mano del desarrollo del metaverso, que darán negocio a algunas compañías. El hardware (el dispositivo que se use para conectarse al metaverso), el ensamblamiento de las piezas, la gestión y mantenimiento de los servidores que se utilizarán, los programas para el renderizado de gráficos y las memorias.
En el primer caso, el hardware puro, Citi destaca tres nombres propios que se beneficiarán del metaverso. "Se van a necesitar más de 15 sensores y cámaras para el dispositivo", destacan. Los mayores ganadores en este frente serán tres compañías asiáticas: la taiwanesa Genius, la china Will Semiconductor, y la japonesa Sony.
En cuanto al ensamblamiento, la china Goertek, especializada en componentes acústicos (pero no sólo), es la señalada por el banco americano. En hardware aparecen dos nombres: Wiwynn y Quanta Computer, dos compañías taiwanesas. Por la parte del renderizado, el gigante estadounidense Nvidia, y la taiwanesa Micro-Star (más conocida por las siglas MSI) destacan como los grandes beneficiados. Por último, en la parte de la memoria, aparecen dos viejos conocidos del sector: la coreana Samsung y la canadiense Micron Technology.
Se trata de un grupo de compañías tecnológicas, la mayor parte de ellas asiáticas, que merece la confianza del consenso de analistas. Según los datos que recopila FactSet, salvo MSI, cuyos títulos reciben la recomendación de mantener, el resto merece el consejo de compra, y todas ellas, sin excepción cuentan con potencial alcista para los analistas (ver gráfico).