148.900 millones de dólares (122.000 millones de euros). Esa es la cantidad emitida en bonos verdes por empresas y organizaciones de todo el mundo en lo que va de año, de acuerdo con los datos de la organización de referencia, la Climate Bonds Initiative (CBI). Más noticias sobre inversión sostenible en elEconomista Inversión sostenible y ESG.
A falta de más de un mes para terminar la primera mitad del año, la cifra supone ya el 50,1% de lo colocado en el conjunto de 2020 (297.000 millones de dólares, unos 244.000 millones de euros al cambio actual). Las cifras de la CBI ofrecen cierto decalaje, con lo cual tampoco recogen, muy probablemente, la totalidad de las operaciones realizadas hasta la fecha.
2020 fue un año récord en colocaciones (el volumen de emisiones subió un 16,5% respecto al de 2019) aunque, en realidad, cada año desde 2014, cuando la CBI empezó a recabar datos, ha sido un año récord, al mejorar el registro del anterior. En aquel primer año, 2014, las colocaciones se situaron en los 40.000 millones de dólares, un nivel que ahora se puede hacer en un solo mes (por ejemplo, en el pasado marzo, cuando se superaron los 49.000 millones). El dato ha ido escalando ejercicio tras ejercicio. En 2016 fueron ya 80.000 millones de dólares, en 2018 unos 170.000 millones. Y de 2018 -año en el que algunos expertos ubican el comienzo de la fiebre ESG en los mercados- a 2020, el volumen emitido se disparó un 50%, hasta los citados 297.000 millones de dólares.

En un informe reciente de Axa IM se señalaba que en el presente año "hemos visto cerca de 65 nuevos emisores de deuda verde en 2021" y que la divisa predominante en estas colocaciones continúa siendo el euro. Una moneda que no utilizó el emisor líder en 2020, Estados Unidos, que alcanzó los 52.100 millones de dólares. En segundo y tercer lugar se situaron Alemania y China. España, tras adelantar a Canadá, se situó octava.
En este país, este mismo miércoles CaixaBank anunciaba una nueva emisión verde. Se trata ya del cuarto bono de la entidad con fines climáticos. En este caso, fue una emisión de 500 millones de libras (unos 580 millones de euros), a un plazo de 5,5 años, en la que el cupón quedó fijado en el 1,50%. La demanda de los inversores más que cuadruplicó la oferta
Es la séptima emisión que realiza el banco bajo el Marco de emisión de bonos ligados a los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) de Naciones Unidas. En concreto, a través de esta emisión, CaixaBank financiará proyectos "de energía renovable y edificios energéticamente eficientes, proyectos que contribuyen a la sostenibilidad medioambiental, mediante la reducción de gases de efecto invernadero, la prevención de la contaminación y la adaptación al cambio climático", según explicó la entidad en una nota.
La demanda cuadruplicó la oferta, al superar los 2.000 millones de libras (más de 2.300 millones de euros).