
Los precios del petróleo están sufriendo una caída que está llevando a los dos barriles de referencia a mínimos de más de dos meses este martes. Los descensos se producen ante la presión de una recuperación de la demanda que parece estar estancada y los aumentos de producción que planea llevar a cabo la OPEP de forma progresiva.
Los futuros vinculados al West Texas Intermediate, el grado de referencia del petróleo crudo estadounidense, corrigen un 9% hasta los 36 dólares el barril en Nueva York, su precio más bajo desde mediados de junio. Por su parte, los futuros del crudo Brent, el índice de referencia internacional, caen un 6% y pierden los 40 dólares el barril. El WTI está cotizando en parte la caída que que sufrió ayer lunes los precios del Brent, mientras que los mercados estadounidenses estaban cerrados por el Día del Trabajo.
"Ahora, el mercado está volviendo a la realidad", explica Eugen Weinberg, jefe de investigación de materias primas de Commerzbank. "El problema es que la demanda de gasolina en Estados Unidos no ha seguido aumentando".
La caída pronunciada de este martes pone fin a una racha de calma en el mercado del petróleo, que lleva mostrando cierta estabilidad en todo lo que va de verano. Tras el terremoto que vivió el mercado entre marzo, abril y mayo, cuando el espacio para almacenar crudo estuvo a punto de acabarse en varias zonas del mundo, junio, julio y agosto fue una balsa para los precios del petróleo. Ahora parece que vuelven a aparecer curvas en el camino del crudo.