
El Gobierno de la Comunidad de Madrid tratará de evitar la demolición de todo el complejo deportivo que emerge sobre el tercer depósito del Canal de Isabel II en el barrio de Chamberí, en Madrid, y limitarlo al campo de golf. De este modo, pretende salvar las instalaciones de fútbol y pádel, cuya actividad cesará el 16 de febrero, como avanzó este diario.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ordenó el 14 de diciembre la suspensión de las actividades y la restauración de toda la parcela al estado previo al proyecto que en 2007 el Ejecutivo de la entonces presidenta Esperanza Aguirre levantó en pleno centro de la capital sin las licencias requeridas. El Gobierno regional ha presentado un recurso de reposición para "elaborar el plan de demolición", explicó ayer su portavoz Ángel Garrido.
De cualquier forma, la Comunidad "intentará resolver con el Ayuntamiento de Madrid la legalización de la parte que los vecinos quieren que permanezca", según recoge Efe. "Sabemos que los vecinos, incluso quienes promovieron la demanda, quieren que se desmonte sólo una parte de las instalaciones deportivas, no todo el conjunto", abundó. Ahora bien, admitió la complejidad de este asunto "porque es posible que la sentencia obligara a la demolición completa". No en vano, el auto especifica claramente que ha de ser repuestos los terrenos, sin diferenciar entre unas áreas u otras.
Entretanto, la concesionaria, Sport Canal, informó ayer los clientes que el próximo 16 de febrero cesará sus actividades el fútbol y el pádel. La semana pasada ya comunicó del cierre del campo de golf el 31 de enero. Más de 5.000 personas utilizan estas instalaciones a diario, que incluyen una pista de running, cada día. Una campaña contra el cierre del fútbol, y el pádel creada ayer en la plataforma change.org recogió más de 1.500 firmas en sólo 10 horas. Se suma a la lanzada hace dos meses en contra de la clausura del golf, que tiene casi 6.000 apoyos.