
Roma, 12 mar (EFE).- La Justicia italiana continuó hoy con el juicio sobre la Operación Cóndor, que investiga la desaparición de italianos a causa del plan homónimo de dictaduras latinoamericanas en las décadas de 1970 y 1980, y aceptó como partes civiles a numerosos familiares de víctimas y varias organizaciones sociales.
La vista tuvo lugar en el aula búnker de la penitenciaría romana de Rebibbia, duró casi siete horas y estuvo presidida por la jueza Evelina Canale.
La magistrada tuvo que verificar la constitución en el proceso de diferentes personas físicas y jurídicas como partes civiles, en cuyo nombre se abre la causa.
Rápidamente aprobó la presencia de los familiares de las víctimas, pero tuvo que deliberar durante más de una hora sobre la presencia de varias instituciones de cariz social y humanitario.
Así, permitió la constitución del Ayuntamiento de Roma, de la Asociación de Familiares de Detenidos de Bolivia (ASOFAMD), de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Chile (AFDD) y del Partido Comunista del país andino.
Este último, según declaró la jueza, está "legitimado" a presenciar el juicio debido a que entre sus finalidades está "la defensa de los derechos humanos" y precisó que, además, perdió a uno de los dirigentes de su junta central, el desaparecido Jaime Patricio Donato Avendaño.
Fue secuestrado en mayo de 1976 junto al resto de la directiva de la formación, incluido el secretario general, Víctor Díaz, en la conocida como operación de la Calle Conferencia.
La jueza desaprobó, por contra, la presencia en el caso de la asociación argentina Abuelas de Plaza de Mayo, debido a que su finalidad no se corresponde con el asunto juzgado y porque su fundación se produjo después de los hechos investigados.
Esta fue la segunda audiencia preliminar del juicio en primera instancia, que investiga la muerte y desaparición de ciudadanos italianos durante la Operación Cóndor y que cuenta actualmente con 32 imputados de las dictaduras de Bolivia (1), Chile (11), Perú (4) y Uruguay (16).
Entre estos últimos se encuentra Jorge Néstor Fernández Troccoli, antiguo dirigente de la FUSNA, el Cuerpo de Fusileros Navales, que logró escapar de la Justicia de su país en 2007 justo cuando iba a ser arrestado.
Reside en libertad en Italia, donde cuenta con la nacionalidad, y por el momento ha sido el único de los acusados que se ha personado ante el Tribunal, el pasado 12 de febrero, si bien hoy no lo hizo y estuvo representado por su abogado de confianza, Francesco Guzzo.
Durante la sesión estuvo presente la exfiscal uruguaya y actual presidente de la Defensoría del Pueblo, Mirtha Guianze, que persiguió a los criminales de la Operación Cóndor en su país y que no logró capturar a Troccoli.
La jueza Canale estipuló el calendario del proceso, que consistirá en una maratoniana consecución de audiencias, que suman en total 38 y que se celebrarán durante todo el año en curso, con excepción de agosto, la pausa estival.
La próxima vista fue convocada para el 9 de abril a las 10.00 locales (08.00 GMT, con el nuevo horario) y durante la misma se presentará la lista de testigos de las partes, dando así inicio a la fase de instrucción.
Los acusados uruguayos son Jorge Alberto Silveira, Ernesto Avelino Ramas, Ricardo José Medina, Gilberto Valentín Vasquez Bisio, Luis Alfredo Maurente, José Felipe Sande, José Horacio Gavazzo, José Rica Arab, Juan Carlos Larcebeau, Gregorio Conrado Alvarez y Ernesto Soca.
También Juan Carlos Blanco, el teniente Ricardo Eliseo Chávez Domínguez, el general Iván Paulós, Pedro Antonio Mato Narbondo y el propio Troccoli.
El boliviano es el exministro de Interior Luis Arce Gómez, y los peruanos son el expresidente Francisco Morales Bermúdez, el coronel Martín Martínez Garay y los generales Germán Ruiz Figueroa y Pedro Richter Prada.
Los chilenos son Juan Manuel Guillermo Sepúlveda Contreras, jefe de la DINA (aparato represor de Pinochet); Daniel Aguirre Mora, exprefecto de la Policía, y el militar Sergio Víctor Arellano Stark.
Además, Pedro Octavio Espinoza Bravo (brigadier), el expolicía Carlos Luco Astroza, el coronel Marcelo Luis Moren Brito, el suboficial Orlando Moreno Vásquez, el coronel Hernán Jerónimo Ramírez, el coronel Rafael Francisco Ahumada Valderrama, el excomandante Luis Joaquín Ramírez Pineda y el brigadier Manuel Vásquez Chahuan.
La Operación Cóndor fue un plan ideado por el general chileno Augusto Pinochet que orquestó la represión de la oposición política en las décadas de 1970 y 1980 por parte, sobre todo, de los regímenes dictatoriales de Chile, Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia.