Ingrid Betancourt "va a ser un día presidente de Colombia" dice ex rehén

Ingrid Betancourt, secuestrada desde 2002 por las FARC, "va a ser un día presidente de Colombia" por su valentía y coraje, dijo este jueves el ex congresista Eladio Pérez, que compartió cautiverio con ella en las selvas y que fue liberado ante delegados enviados por Venezuela.

"Ingrid va a ser un día presidente de Colombia y ahí estaremos los colombianos que hoy pensamos que podemos todavía construir una patria grande y en paz, y la vamos a acompañar", dijo Pérez desde Caracas a la radio Caracol.

Ella es una "mujer valiente y corajuda (...) tiene unas propuestas muy importantes para cambiar el país. Entiende perfectamente que con la violencia se puede destruir al Secretariado (cúpula) de las FARC, pero no se superará la miseria" de Colombia, agregó.

Pérez señaló que pese al trato inhumano que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas) han dado a sus rehenes, "Ingrid no tiene resentimientos (...), es una mujer de alma grande y generosa".

Betancourt fue secuestrada por las FARC en 2002 cuando realizaba campaña por la presidencia a nombre del minoritario partido verde Oxígeno, en el departamento de Caquetá (sureste). En las elecciones de ese año obtuvo 0,5% de los votos.

Pérez, que entonces presidía la comisión de paz del Congreso e integraba el opositor partido Liberal, fue secuestrado pocos días antes por la guerrilla que desvío el avión comercial en que viajaba y lo hizo aterrizar en una carretera del sur del país.

El miércoles las FARC entregaron a Pérez y a otros tres antiguos congresistas en las selvas del departamento de Guaviare, vecinas a Caquetá, como un gesto hacia el presidente venezolano Hugo Chávez.

Pérez señaló que Betancourt se ha convertido en una "botín de oro" para las FARC, que proponen intercambiar a un grupo de rehenes en su poder -ahora conformado por al menos 39 cautivos- por 500 guerrillero presos.

El ex congresista relató que Betancourt, que adquirió la nacionalidad francesa por su matrimonio, envío con él un cinturón que hizo durante su cautiverio, como regalo para su hija Melanie que vive en París.

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