
Una de las labores fundamentales de la Agencia Tributaria es la vigilancia de aquellos grupos de ciudadanos que, a ojos del organismo, pueden incurrir en mayores incumplimientos fiscales. Cada año esta tarea se actualiza y en 2025 son varios los grupos de autónomos que estarán estrechamente observados por Hacienda.
El Plan Anual de Control Tributario y Aduanero de 2025 desgrana cuáles son las actuaciones principales de Hacienda para luchar contra el fraude fiscal y la economía sumergida. El texto, que se puede consultar en este enlace, promete la presencia de la Agencia Tributaria "en aquellos sectores y modelos de negocio en los que se aprecie alto riesgo de existencia de economía sumergida".
Estos grupos serán objeto de actuaciones coordinadas por parte del organismo. En concreto, Hacienda se refiere a los contribuyentes que:
- No admitan pagos con medios bancarias o realicen un uso excesivo de dinero en efectivo, poniendo el foco en el uso de este dinero por encima de los límites establecidos.
- Usen medios de pago radicados en el extranjero para no cumplir con las obligaciones de suministro de información a Hacienda.
- Ostenten signos de riqueza, patrimonio o rentabilidad que sean incoherentes con las rentas declaradas.
- Tengan rentabilidades incompatibles con la naturaleza de su actividad o con los datos aportados a Hacienda o, por el contrario, tengan pérdidas recurrentes e incompatibles con la lógica de cualquier actividad.
- Puedan usar herramientas informáticas susceptibles de ser utilizadas para ocultar ventas, como por ejemplo el software de doble uso.
La importancia del dinero en efectivo
Hacienda insiste en que considera "prioritario" el control de las operaciones realizadas con dinero en efectivo, "ya que suelen estar muy vinculadas a la economía sumergida". Por eso, informa el organismo, "continuarán siendo objeto de atención una vez más por parte de la Administración tributaria".
El control del efectivo, de hecho, se extiende a un campo aparentemente tan alejado de los profesionales por cuenta ajena como el de la prevención y represión del contrabando, narcotráfico y blanqueo de capitales. A este respecto, Hacienda desarrollará "acciones operativas específicas de control sobre movimientos de medios de pago en efectivo" para "neutralizar las estructuras económicas y financieras de las organizaciones criminales, y evitar que la amenaza del blanqueo de capitales y el fraude fiscal pueda ser culminada o apoyada mediante la circulación de dinero en efectivo en importantes cantidades".