
El Congreso de los Diputados aprobó este jueves los juicios exprés para los okupas y agiliza la recuperación de la vivienda. A partir de ahora los casos de delito por allanamiento de morada y usurpación de vivienda se tramitarán por el procedimiento abreviado, lo que se conoce como juicios rápidos, que acorta los plazos de los procesos judiciales y permite la celebración de juicios en 15 días.
El PNV, con apoyo del PP, Junts, ERC, UPN, Coalición Canaria y, por error, de Bildu, logró sacar adelante su enmienda al Proyecto de Ley de eficiencia de la Justicia para cambiar la Ley de Enjuiciamiento Criminal e incluir los casos de ocupación de viviendas en el procedimiento abreviado.
Concretamente, la enmienda aprobada modifica el artículo 795 de la ley, que regula los procedimientos abreviados, para incluir entre ellos el allanamiento de morada y la usurpación de vivienda.
Los procedimientos abreviados se dan cuando los delitos son menos graves, es decir, conllevan penas de prisión inferiores a cinco años, y se pilla al infractor durante su ejecución. También están dentro de los juicios rápidos los delitos de hurto, robo, contra la seguridad del tráfico, entre otros.
Los plazos del procedimiento abreviado
Los procedimientos abreviados se caracterizan porque, una vez detenido el infractor, el juez le cita a comparecer en un plazo máximo de 72 horas mientras que la policía judicial prepara los informes y documentación necesaria en este tiempo.
Estos datos se remiten al juez, que evaluará si solicitar o no diligencias urgentes. Una vez se terminen las diligencias, el juez oirá a las partes y a la Fiscalía. Si estas piden juicio oral, deberán presentar un escrito de acusación al juez y el acusado tendrá cinco días para presentar su escrito de defensa. Una vez entregado, el juez pondrá la fecha del juicio en un plazo máximo de 15 días. Celebrado éste, deberá dictar sentencia en un plazo de tres días.
El error de Bildu
La portavoz de Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, reconoció este viernes su error y se comprometió a buscar vías para corregir los efectos de la enmienda. Sin embargo, el proyecto de ley, una vez aprobado este jueves por el Congreso, pasa ahora al Senado, donde el PP tiene mayoría, por lo que es difícil que sume fuerzas políticas para tumbar la enmienda.