
ACS y el grupo francés Vinci han solventado "definitivamente" algunas de las provisiones recogidas en el acuerdo de venta de la mayor parte de Cobra, filial industrial de ACS, y que se suscribió el 31 de diciembre de 2021. La firma española asegura que ninguno de los acuerdos alcanzados "tendrá impacto significativo" en sus cuentas, según ha notificado en una comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)
Asimismo, el acuerdo también recoge que el suplemento a pagar por cada medio megavatio (MW) de energía renovable desarrollado por Cobra queda fijado en 380 millones de euros, con un máximo de 600 millones. No obstante, recalca que al haber abonado Vinci 80 millones, quedan pendientes de pagar 300 millones, los cuales serán abonados por la francesa "de conformidad con el acuerdo que se comunica".
ACS y Vinci cerraron la operación de venta de la división industrial de la compañía presidida por Florentino Pérez por 4.902 millones de euros, una operación con una plusvalía neta de 2.900 millones. La transacción tuvo que ser autorizada por el Consejo de Ministros, una operación que también contó con el visto bueno de la Unión Europea.
Ya en ese acuerdo se aseguraba que, más allá de los 4.902 millones de euros, ACS recibiría un pago variable máximo de 600 millones por cada medio GW desarrollado por la división industrial entre el 31 de marzo de 2021 y hasta los siete años siguientes a la ejecución de la compraventa. Cobra, con más de 75 años de experiencia en todos los campos relacionados con la ingeniería, la instalación y el mantenimiento industrial de infraestructuras, contaba en 2021 con más de 36.000 empleados, una cartera mayoritariamente internacional y presencia en 70 países.