
Adif Alta Velocidad ha adjudicado por 215,8 millones de euros la construcción de la nueva estación de Valladolid-Campo Grande, que contará con un nuevo edificio de 7.900 metros cuadrados y cinco vías de alta velocidad, y además reforzará la integración de la terminal y el ferrocarril en la ciudad. El proyecto está recurrido por el Ayuntamiento de la ciudad.
El contrato comprende la construcción de las diferentes actuaciones que conformarán la nueva gran terminal ferroviaria, que consistirá en un edificio para viajeros nuevo, sostenible y de innovador diseño; la remodelación y ampliación de la zona de vías y andenes, una nueva pasarela peatonal que conecte las calles a ambos lados de la estación, un aparcamiento subterráneo, la renovación del entorno urbano de la estación y sus accesos, y un edificio de servicios ferroviarios técnico y de oficinas.
Según Adif, con estas instalaciones, Valladolid-Campo Grande se refuerza como nodo de la alta velocidad de la mitad norte del país y del Corredor Atlántico, ya que por la estación pasan todos los trenes de alta velocidad que circulan entre Madrid y otras capitales de la Comunidad (Palencia, León y Burgos), Asturias y, en el futuro, también a Cantabria y el País Vasco, han informado fuentes de Adif.
El elemento más emblemático del proyecto es el nuevo edificio de viajeros que, a partir de un innovador diseño, se construirá en altura, sobre la playa de vías, al norte de los históricos edificio y marquesina actuales, han señalado las mismas fuentes. En sus 7.900 metros cuadrados, el doble respecto al actual inmueble, albergará una zona de espera, información, venta de billetes y otros servicios, un área comercial, sala de embarque y acceso a andenes.
El edificio pretende ser un referente de sostenibilidad, al primar la entrada de luz natural, las energías renovables y soluciones constructivas que reducen los consumos, como la innovadora 'piel exterior' que lo recubrirá para reducir la exposición al sol o los grandes lucernarios de su cubierta.
Y también se construye con el objetivo de ser referente de accesibilidad, pues, si bien uno de sus elementos distintivos será la monumental escalinata de su fachada principal, contará con rampas, escaleras mecánicas y ascensores en todos los accesos a la estación, y en la conexión de ésta con los andenes.
Rechazo municipal
El proyecto de la nueva estación está envuelto en la polémica desde que fue presentada "a bombo y platillo" por el anterior alcalde de Valladolid y actual ministro de Transportes. El Ayuntamiento de la ciudad ha expresado sus dudas sobre la conveniencia de una obra que puede suponer el descarte definitivo del soterramiento de las vías, que defiende frente a la opción del Ministerio de la integración ferroviaria.
De hecho, el actual mandatario municipal, Jesús Julio Carnero, ha anunciado un recurso ante los tribunales para impedir una obra que también ha recibido críticas de la Cámara de Contratistas de Castilla y León, además de alcaldes de otras ciudades como los de León y Salamanca, que consideran que la inversión es "estratosférica".