Andamios, ladrillos, cemento, yeso, hormigón... Es lo primero que viene a la mente al pensar en construcción, pero estos materiales y elementos, aunque mantienen su protagonismo, ya no son las únicas estrellas del sector. La integración de las tecnologías y el avance de la digitalización en la construcción se está convirtiendo en un elemento clave. La adopción de ciertas herramientas ha supuesto una revolución en la forma que se planifican, diseñan, construyen y gestionan los proyectos de construcción.
La utilización de la digitalización ofrece una mayor seguridad en el sitio de la construcción, lo que garantiza unas mejores condiciones tanto para los trabajadores como para la obra. Otro de los beneficios es que existe una mayor eficiencia en la planificación y el diseño, lo que desemboca en mejorar los plazos de construcción y los presupuestos de los proyectos, es decir, en una reducción de tiempo y de costos, por lo que aumenta la rentabilidad de las obras. El uso de herramientas tecnológicas también permite realizar un seguimiento más preciso de los progresos, con la posibilidad de tomar decisiones a tiempo para evitar errores a futuro. Además, la digitalización apoya la sostenibilidad de los proyectos, ayudando a la reducción de residuos y errores en la gestión de los materiales. Todo ello se apoya en una comunicación más fluida entre los miembros del equipo.
Son varios los avances digitales que la construcción está incorporando para el desarrollo de su actividad, pero, sin duda, la Inteligencia Artificial se ha convertido en una herramienta más para las compañías del sector.
En Ferrovial llevan años trabajando en la aplicación de soluciones basadas en IA, aportando distintos impactos positivos a su actividad. Uno de ellos es la reducción de riesgos relacionados con la seguridad y la salud en el trabajo a través de la prevención de accidentes laborales; con la operación, por ejemplo, anticipando retrasos en una obra y reduciendo el riesgo para los usuarios al facilitar una respuesta eficiente ante cualquier imprevisto, como el desvío del tráfico en caso de accidente u obstrucción de la carretera.
Un ejemplo de esto es la sensorización y adaptación tecnológica de espacios. Ferrovial trabaja en la implantación de sensores en los equipos de protección individual (EPIS) de los profesionales y los conectan con otros instalados en la maquinaria. Así, cuando se produce un peligro, los EPIS pitan o vibran para avisar al trabajador del riesgo.
En el caso de las autopistas inteligentes, AIVIA, los modelos de IA de Ferrovial son capaces de analizar millones de datos extraídos de sus autopistas sensorizadas y cruzarlos con el software de los vehículos para avisar a los conductores de eventos extraños en la calzada con mucha antelación y, con ello, hacer las carreteras más seguras. Este sistema también permite predecir los tiempos de viaje.
La IA facilita el acceso a la información y hace el trabajo más operativo en infraestructuras e instalaciones. Otro de los impactos positivos es la generación de oportunidades, al permitir analizar una gran cantidad de datos y tomar decisiones a la hora de licitar o no por un proyecto u optimizar presupuestos. Además, la compañía utiliza la IA para optimizar la planificación de la construcción y reducir al máximo su impacto medioambiental. Desde hace más de un año Ferrovial también aplica la IA Generativa en sus entornos de trabajo de oficina, para aliviar la carga de trabajo de sus profesionales ahorrando tiempo en algunas tareas.
La digitalización en Abertis viene de la mano de proyectos para la movilidad y el transporte por carretera del futuro. El grupo apuesta por el desarrollo de modelos de predicción del deterioro de pavimentos que usan datos de vehículo conectado en tiempo real, uso de modelos predictivos e información satélite para cualificar y mitigar el riesgo de colapso de taludes, uso de drones y visión por computación para monitorear e identificar patologías en estructuras criticas.
Entre sus proyectos está el Future Road Lab, centro concebido como laboratorio de pruebas para testar las nuevas herramientas y sistemas de gestión de la red viaria. En estas instalaciones también se prueban soluciones aplicadas con inteligencia artificial. Por ejemplo, en ellas Autopistas ha desarrollado Video Analytics, un software aplicando IA que permite transformar las imágenes en datos en tiempo real: contaje de vehículos, tipología del vehículo, velocidad de paso, colas, accidentes, presencia de animales, o condiciones de la vía. Estos datos viajan hasta el Centro de Operaciones y Seguridad Vial de Autopistas, desde donde, en un futuro, se podrá avisar a los usuarios de las condiciones de la vía, así como ofrecer recomendaciones personalizadas.
En España, Autopistas está realizando junto con Seat pruebas de envío de alertas de seguridad vial a los vehículos de la autopista C-32 de la Generalitat de Cataluña. Autopistas prevé poner en marcha este tipo de avisos para facilitar en tiempo real información de la vía útil a los usuarios como pueden ser incidencias, accidentes o congestiones inesperadas, entre otras.
Otro de los proyectos de Abertis es Zero Accidents AI Challenge. Esta iniciativa es un llamamiento a startups de todo el mundo con el objetivo de encontrar soluciones innovadoras y efectivas para predecir, prevenir y gestionar accidentes a través de la combinación de la inteligencia artificial con datos de satélite y de vehículos.
Por otro lado, de la mano de Azisa&Aren –startup ganadora del Drone Challenge lanzado a finales del año pasado–, Abertis ha comenzado a utilizar drones en la inspección de infraestructuras aplicando IA en el procesado de imágenes.
En la adopción de la IA, tanto tradicional como generativa, y otras tecnologías avanzadas se apoya FCC Construcción para continuar la senda de su transformación empresarial basada en la digitalización, con el fin de aumentar la eficiencia y la productividad de sus obras. Siempre bajo sus estándares éticos y de gobernanza, su implementación tiene un triple enfoque. Por un lado, se plantean proyectos de I+D+i en consorcios con empresas tecnológicas y centros de investigación. Por otro lado, la búsqueda de los distintos equipos para incrementar la eficiencia en procesos, desde la licitación a la propia ejecución, desemboca en actividades novedosas mediante el desarrollo de innovación interna. Por último, también se implementan soluciones comerciales.
En este sentido, el uso de la IA en FCC se hace en distintos niveles, desde el apoyo al personal en su día a día a desarrollos que, por sí mismos o en combinación con otras tecnologías (drones, BIM , GIS, etc.) necesitan una inversión y una personalización para conseguir un objetivo determinado. En dichos casos, buscan la replicabilidad en futuros proyectos que permitan seguir mejorando la productividad.
Con el objetivo de maximizar el valor y mejorar la eficiencia, Aleatica, junto con su accionista de control IFM Investors, evalúa el potencial de la inteligencia artificial en sus unidades de negocio. Como parte de esta estrategia, ha implementado proyectos piloto de IA enfocados en aumentar la productividad y acelerar la transformación digital. Uno de los principales desafíos es estandarizar la calidad de los datos y asegurar su disponibilidad de forma segura, condición clave para desarrollar soluciones efectivas basadas en IA.
Actualmente, las iniciativas se centran en la operación de activos y la optimización de procesos administrativos. Por ejemplo, en Aleatica emplean la IA en inspecciones autónomas para gestionar inventarios, detectar anomalías y evaluar el estado del pavimento. La compañía también usa drones con capacidades de IA para realizar inspecciones detalladas, identificar puntos críticos y generar modelos predictivos que anticipen el deterioro de las infraestructuras.
En el caso de Sacyr, incorpora en algunos de sus proyectos inteligencia artificial para favorecer los procesos de conservación de carreteras y construcción de edificios. Además, la utilizan en proyectos que requieren de digitalización para mejorar su eficiencia. Uno de ellos es el Hospital Cognitivo, una plataforma de gestión integral de infraestructuras hospitalarias. Sacyr lidera el consorcio que desarrolla este proyecto y en el que también participan Sener Mobility, Fracttal, Cuatro Digital, Open Ingenius, Áptica y los centros tecnológicos de Tecnalia, UPM y CSIC. Trabajan en la creación de pilotos basados en la implantación de nuevas tecnologías como inteligencia artificial, IoT, algoritmos avanzados, BIM 7D o Big Data que transformarán la gestión hospitalaria.
Por otro lado, la compañía está implantando el proyecto de IA de la startup Valerann en la Ruta 78 en Chile. Su colaboración con esta empresa nace del programa de innovación abierta Sacyr iChallenges. En este caso, su tecnología permite a Sacyr aprovechar fuentes de datos aplicando algoritmos de visión artificial y predictivos, para optimizar la detección de incidentes, los tiempos de respuesta y el aprovechamiento de la infraestructura de los Sistemas Inteligentes de Transporte en esta infraestructura viaria.
Para mejorar la seguridad vial es necesario conocer el estado del firme de una carretera para realizar un buen mantenimiento. En este sentido, Sacyr InRoad Evo es una iniciativa de Sacyr Conservación basada en inteligencia artificial que evalúa los principales marcadores e índices del estado de conservación de las carreteras.
Otro de sus proyectos que utiliza IA es Terraplan, que optimiza los plazos y costes de la obra y minimiza el impacto medioambiental y social del movimiento de tierras. Por último, el equipo de TIC de la compañía ha creado SinergIA, un entorno seguro para sus sistemas de información de uso exclusivo. Esta es una herramienta de IA generativa alimentada de información pública y privada de Sacyr, para que ayude a sus empleados a mejorar su productividad y eficiencia.
Acciona emplea la IA desde hace una década para tareas como mantenimientos predictivos, por lo que ahora explora la IA generativa para hacer más eficientes sus procesos. Desde la compañía explican que "estamos testando la IA generativa en muchos campos, y uno en el que nos parece particularmente útil es en el procesamiento de grandes cantidades de documentos. Así, podemos dialogar con words o pdfs, obteniendo informaciones de manera mucho más rápida. Eso es muy práctico, por ejemplo, para preparar ofertas en licitaciones, gestión documental, localización de referencias, asuntos contractuales, controles de calidad, etc".
En este sentido, emplea la herramienta AQuery que es un chatbot que ayuda a los empleados de Acciona a encontrar respuestas combinando distintas tecnologías avanzadas de RAG (Retrieval-augmented generation). Otro ejemplo es el uso en procesamiento de imágenes o información procedente de otros sensores, por ejemplo, en el proyecto Road Monitoring. En este caso, se procesa la información captada por el vehículo de grabación empleando IA. De esta manera, mediante las imágenes grabadas y el análisis de las vibraciones del vehículo, se pueden alertar de grietas, baches y otros problemas del firme, y también sirve para hacer inventario de señales o detectar aquellas con baja visibilidad, sucias, etc. Esto antes se hacía de manera manual, con lo que era menos exacto y más complejo y costoso. Actualmente se está testando en la autovía A2, de cuyo mantenimiento se ocupa Acciona.