Madrid 
Las empresas que pertenecen a la Asociación Profesional de Empresas de Limpieza (Aspel) representan el 35% del total del sector al contar con 139.117 trabajadores de los 394.231 que hay en España dedicados a la limpieza. Las compañías, entre las que se encuentran Acciona, Actúa, Brócoli Facility Service, Clece (ACS), Cliner, CLN Grupo, Grupo Eulen, FCC, Ilunion, Ingesan (OHLA), Lacera, L'Operosa, Onet, Sagital, Samsic, Serveo y Vectalia, facturaron en España 2.732 millones de euros en el ejercicio correspondiente al año 2023, frente a los 2.502 millones del año anterior, lo que supone un aumento del 8,78%.
El informe anual 'Datos del sector limpieza edificios y locales', Aspel ha destacado que el sector de la limpieza representa el 1,07% del total del PIB y el total de trabajadores dedicados a la limpieza suponen un 2,6% (394.231 empleados) de los 19,7 millones de asalariados que hay en España, siendo la mayoría, en un 76%, mujeres. La cifra el año anterior supuso una representación del 2% (386.316 trabajadores), por lo que se deduce que el crecimiento ha sido de 0,6 puntos.
Retos del sector de la limpieza
El presidente de la asociación, Juan Ignacio Beltrán, ha destacado los retos a los que se enfrenta el sector a pesar de los buenos datos arrojados en el ejercicio de 2023. El primero de ellos es la Ley de Desindexación, con la que se pretende revisar los precios y solicitar una modificación a las prórrogas forzosas, que no tienen en cuenta el aumento de los costes de las empresas. Otro de los grandes retos a los que se enfrentan dentro del sector de la limpieza es el del absentismo, ya que los trabajadores que se ausentan de su trabajo suponen un total de 60.000, un 12% del sector. Pero el problema parece ser global, ya que en 2023, el absentismo supuso un 7% del total de los trabajadores, por lo que, con alrededor de 20 millones en España, diariamente hubo más de 1 millón de empleados que no asistieron al trabajo, con unos costes directos para las empresas de 7.125 millones de euros.
Beltrán también ha incidido en que otros de los grandes problemas son la productividad, el abuso por parte de las Administraciones Públicas, la contratación y formación del personal; y, en el último lugar, la comunicación de la importancia del sector.
Con todo, el presidente de Aspel ha remarcado que el sector vive un buen momento, tras la remontada previa a los años del coronavirus, y esperan que los próximos años sean más prósperos tanto para la asociación como para el resto del sector.