
El Ministerio de Transportes ha adjudicado el contrato para una de las tres grandes zonas en que divide las carreteras de su titularidad en la provincia de Castellón para el mantenimiento y conservación de las vías. Serveo, la empresa especializada en servicios de infraestructuras propiedad de Portobello y participada por Ferrovial, junto a la valenciana Ocide se han hecho con el contrato que incluye tramos de la A-7, CS-22, N-340, N-340A y N-225 en la provincia.
A la licitación pública de la zona CS-1 se presentaron en total 22 ofertas de distintos grupos. La propuesta de Serveo y Ocide se impuso con una oferta económica por valor de 8,9 millones de euros, según recoge el expediente de contratación público.
Además, el Estado tiene en licitación actualmente el concurso para otra de las zonas de la provincia de Castellón, la denominada CS-3. En este caso el presupuesto alcanza los 12,71 millones de euros, sin incluir impuestos.
Según ha informado el Ministerio, la duración de las tareas de conservación y explotación es de tres años, con posibilidad de prórroga de dos años y otra adicional de un máximo de nueve meses.
El contrato incluye el mantenimiento y conservación de 99,1 km de carreteras del sector número 1, de los que 20 km son de autovías, incluye varios tramos de la A-7 (desde km 274 al 284, Variante de la Vilavella) y varios tramos de las carreteras CS-22, N-340, N-340A, N-225, así como la conexión de la CS-22 con la N-225.
Obra de asfaltado en Nules
Además del mantenimiento de estas carreteras castellonenses, el contrato también conlleva la ejecución de la obra de rehabilitación superficial de firme entre los kilómetros 953 y 955,5 de la carretera N-340, en el término municipal de Nules.
Según Transportes, el nuevo modelo de contratos mixtos (servicios y obra) para la ejecución de operaciones de conservación y explotación en la Red de Carreteras del Estado persigue ofrecer un servicio integral de movilidad al usuario, mejorar el estado de la carretera y red y optimizar los recursos públicos.