Los anuncios navideños del espumoso Freixenet son míticos para los espectadores españoles. La marca apostó por aliarse con celebridades del cine para sumar notoriedad.
Eso sí, trabajar con grandes estrellas de Hollywood no siempre es sencillo, algo que sabe bien la familia Bonet.
Según relata el diario El Mundo, el primer personaje estelar en aparecer en la pequeña pantalla de los hogares españoles por Navidad fue la actriz y cantante Liza Minelli, en 1977.
El artista Gene Kelly fue el protagonista del anuncio de las navidades de 1981, y dejó en la familia un impactante recuerdo por su calidad humana, muy alejada de todo divismo.
Sin embargo, en la mayoría de las ocasiones, las estrellas dieron más de un dolor de cabeza a los responsables de la bodega. Una de las que dio más problemas fue Raquel Welch. La bella intérprete americana exigía que bajísimas temperaturas en el plató y solo comía pollo hervido. "Una auténtica diva", aseguró Pedro Bonet recordando el rodaje en 2011.
El caso de Sharon Stone también fue inolvidable, en el peor de los sentidos. Unos días antes de rodar en Londres, con el mejor estudio alquilado, la protagonista de Instinto Básico comunicó que no podía ir y forzó a todo el equipo a acudir a Los Angeles para grabar el spot. La mano izquierda de Antonio Banderas y del director Bigas Luna ayudaron a mantener a raya los divismos de la actriz.
