Se trata de una cifra seis veces superior a la de chicles y caramelos importados (125 millones) y además supone el 55,7% del total de las golosinas producidas en España, según datos suministrados por Produlce y consultados por Servimedia.
Estas cifras dan a España una balanza comercial a su favor de 667 millones en este sector, un saldo positivo superior al de otros sectores como el cárnico (+594 millones).
En total, España exportó 213.558 toneladas de estos productos, un 3,81% menos que en 2023, a pesar de lo cual las exportaciones en valor crecieron un 2,05%. Por mercados, fueron Estados Unidos (18% total exportaciones), Francia (14%) y Alemania (12%) los tres principales destinos de las chucherías españolas.
Este buen desempeño hizo que este segmento se sitúe por encima de las exportaciones de sectores como el cacao o el chocolate -exportó 643 millones, un 11,62% más que el año pasado- o del sector galletero, que vendió productos al mercado exterior por valor de 618 millones el año pasado, un +0,46%.
Otro sector destacable es el de turrones y mazapanes, un sector tradicional y con largo arraigo en España en el que nada se importa. En este ámbito, España exportó productos por valor de 68,59 millones de euros (-1%) a pesar de que el volumen aumentó un 9,3%. Por destinos, son Reino Unido (+20%) y EEUU (+16%) los mercados a los que más turrones y mazapanes se exportaron.