
Duro Felguera apuró los plazos para responder al litigio que tiene abierto en Argelia por incumplimientos en la construcción de una central térmica en Djelfa, al Norte del país. La cotizada española presentó el lunes su respuesta a las demandas de Sonelgaz, que le reclama 413 millones de euros, rechazando las cantidades exigidas por la firma africana.
Fuentes de la propia Duro Felguera explican a elEconomista.es que el lunes se contestó a la reclamación de Sonelgaz ante la Chambre Algérienne de Commerce et d'Industrie (CACI, por sus siglas en francés). Aunque no detallan el contenido de las alegaciones, la empresa ya dijo en un comunicado remitido a la CNMV que en su escrito de oposición rechazará la reclamación "al entender que la suspensión del contrato es conforme al derecho por los incumplimientos en que ha concurrido Sonelgaz".
Además, la cotizada presidida por Eduardo Espinosa pretendía reclamar alrededor de 200 millones de euros por daños y perjuicios a la energética africana.
Duro Felguera así defiende sus tesis ante el arbitraje abierto en el país. Lo hace un mes más tarde de lo previsto, pues el plazo inicial estaba fijado para el 10 de diciembre, pero se le concedió un mes más hasta el 13 de enero. En paralelo a las demandas de Sonelgaz, la compañía trata de encontrar una solución amistosa, para lo que pidió ayuda tanto a las autoridades españolas como a las mexicanas –Grupo Prodi, su accionista de referencia (55%), es de allí-. Por el momento parece que las conversaciones no llegaron a buen puerto.
Y aunque todavía no se haya resuelto la disputa, la reclamación de la firma argelina ya le ha costado a la organización asturiana entrar en preconcurso de acreedores después de anotarse una provisión de 99 millones de euros por obligación de la CNMV y sus auditores, KPMG. Con ella, el patrimonio contable cayó hasta los 220 millones negativos. Ni siquiera el tratamiento contable que le da a los 120 millones prestados por la Sepi, los 13 de la banca y los 6 del Principado de Asturias pudieron compensar el agujero generado.
Antes, con el estallido de la noticia, el regulador bursátil la suspendió de cotización durante tres semanas.