La industria naval vasca afronta la transformación de su actividad hacia la digitalización y la sostenibilidad, cambio necesario y urgente para asegurar la competitividad futura del sector. Para ello, se apoyará en los fondos europeos Next Generation, a través del Perte naval.
No obstante, el retraso en la publicación de las bases y la convocatoria de esta herramienta, complica la anticipación del sector en la conformación de proyectos, al desconocer la normativa y exigencias que serán requeridas.
El secretario general de Industria del Gobierno español, Raúl Blanco, se reunió recientemente con la industria naval vasca en Bilbao - con cerca de 60 agentes-, para debatir sobre las oportunidades que ofrece el Perte sectorial a Euskadi. Precisamente, beneficiará sobre todo a los astilleros privados, perfil que cumplen los fabricantes de buques vascos: Zamakona, Murueta y Balenciaga.
Blanco aseguró que el sector que opera en Euskadi tendrá "un papel relevante" en un Perte que prevé una inversión total de 1.460 millones de euros, con una contribución del sector público de 310 millones y una inversión privada de 1.150 millones de euros, aunque no concretó el montante de las ayudas que podrían llegar de este programa.
Plazos de presentación
El reto fundamental de este Perte es diversificar el sector hacia nuevos productos, su digitalización, la mejora de su sostenibilidad medioambiental y la capacitación de sus empleados.
Las bases de Perte naval todavía no se han publicado, algo que preocupa a la industria vasca porque al no conocer la normativa y las exigencias no puede "armar los proyectos", señalan desde el Foro Marítimo Vasco (FMV).
"El Perte naval es una gran oportunidad para nuestra industria, pero hay unas bases que desconocemos. Nos han trasladado que saldrán a finales de junio y que las convocatorias se irán a finales de julio, y a primeros de septiembre. A partir de ahí, tendremos unos 30-40 días para presentar los proyectos", explican desde la asociación vasca. El secretario de Industria explicó que "este semestre será decisivo".
Desde FMV comentan que se han definido y priorizado unas tecnologías en el área de la industrialización, digitalización, gemelo digital y sostenibilidad que van a presentar a sus socios para poder definir los proyectos.
Pero además, animan "a no perder de vista los programas que en esa línea tiene el Gobierno vasco y la Unión Europea", de apoyo a la digitalización e industria 4.0. De esta manera, el sector naval "podrá afrontar los retos de futuro y dar respuesta a las exigencias tecnológicas de los armadores internacionales", aseguran.
En la reunión también estuvo la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, quien pide que los recursos "lleguen cuanto antes". La consejera explicó que el Foro Marítimo Vasco y el Clúster de Energía están trabajando en la integración de ambas actividades para la diversificación del sector naval y para que los astilleros, además de construir y reparar barcos, trabajen en eólica offshore.
2.900 millones de euros
El sector naval facturó casi 2.900 millones en 2021, emplea a 13.600 personas y representa el 2,1 % del PIB de la economía vasca. La cartera de pedidos de los tres astilleros vascos, que tienen cinco plantas productivas, se incrementó en siete nuevas unidades en 2021. De esta manera, tiene 15 unidades a fabricar que garantizan su carga de trabajo hasta finales del 2023 y, por consiguiente, actividad para la industria auxiliar.