El Banco de España advierte de que los riesgos a la baja en el ritmo de crecimiento de la economía "se han intensificado de manera apreciable" en los últimos meses, con riesgos de involución en el consumo y la inversión por el alargamiento de la situación de incertidumbre política.
En su último Informe de Estabilidad Financiera, correspondiente al mes de mayo, el organismo que dirige Luis María Linde expone que el balance de riesgos para la economía española ha empeorado en el último semestre, y destaca, en el ámbito interno que "la posible prolongación en el tiempo de la actual situación de incertidumbre política introduce ciertas dudas sobre el curso futuro de las políticas económicas y podría acabar afectando negativamente a las decisiones de consumo e inversión".
Incertidumbre política
En este punto, el Banco de España coincide con la patronal CEOE, que alertaba también respecto que "la incertidumbre política es un factor que puede condicionar el avance económico y del empleo". Por ello, la organización empresarial reitera "la necesidad de que, tras el nuevo proceso electoral, se alcance un entorno institucional que asegure la estabilidad y la seguridad jurídica necesarias para seguir avanzando en el proceso de recuperación y creación de empleo".
En el terreno fiscal, el regulador resalta también que la desviación del déficit en 2015 con respecto a los objetivos comprometidos con Bruselas "pone en evidencia la necesidad de priorizar la culminación del proceso de consolidación ión fiscal". Y, en este contexto, expone que la adopción de medidas presupuestarias adicionales "podría alterar" el perfil de crecimiento del PIB, "comportando costes en el corto plazo y generando beneficios, en términos de las ganancias de confianza correspondientes, que sólo se harían totalmente visibles transcurrido un tiempo".
A estos factores internos se añaden los procedentes del entorno exterior, que coinciden con los que se ciernen para el conjunto de la zona euro y que están relacionadas con la incertidumbre sobre el crecimiento económico mundial, vinculada especialmente con la evolución de las economías emergentes y con la reciente intensificación de los riesgos geopolítico en alguna áreas, entre los que cita expresamente el referéndum en el Reino Unido sobre la permanencia en la UE o los resultados electorales en varias economías avanzadas.
Economías emergentes
En el caso de las economías emergentes, el foco de atención se mantiene en China, donde el escenario más probable "sigue siendo una desaceleración gradual durante el proceso de transición hacia un modelo de crecimiento que se sustente más en la demanda interna y en la actividad del sector servicios".
La situación de la economía china plantea riesgos adicionales sobre muchas economías emergentes de Asia y América Latina.
Por el lado de los precios, el informe del supervisor añade que la esperada prolongación del escenario de bajas tasas de inflación "eleva los riesgos de posibles efectos negativos de segunda ronda sobre el crecimiento de las rentas nominales, con el consiguiente impacto adverso sobre el proceso de desapalancamiento, aún pendiente de culminar en algunas economías".