El Índice de Precios al Consumo (IPC) estadounidense bajó en julio al 0,1% en tasa mensual, dos décimas menos que el mes anterior. Mientras, en tasa interanual, la inflación se situó en el 0,2%, frente al 0,1% de julio del año pasado. Los analistas consultados por Bloomberg esperaban de media una tasa anual del 0,2% y una subida de una décima en tasa mensual.
Por su parte, la inflación subyacente, que excluye alimentos y energía, bajó una décima, hasta el 0,1%. En el último año, el IPC subyacente se mantuvo en el 1,8%. Ambas lecturas está en línea con lo previsto por los expertos.
Aunque la inflación interanual cerró de nuevo en julio en terreno positivo, está todavía lejos del objetivo del 2% marcado por la Reserva Federal.
El vicepresidente de la Fed, Stanley Fischer, destacó la semana pasada que la inflación está en un nivel "muy bajo", pero consideró que se trata de una situación "temporal" que se acabará "estabilizando".