
Los emprendedores e investigadores españoles registraron durante 2015 ante la Oficina Europea de Patentes (OEP) un 3,8% más de ideas que durante el año anterior. Un dato positivo que conocemos en paralelo a la guerra que sigue protagonizando el Gobierno español con esta institución europea por no reconocer el español como lengua oficial para solicitar esos registros. Este dato refleja que el registro de ideas en España ha crecido muy por encima de la media europea, un 1,6% más.
La Patente Única Europea, que se impondrá previsiblemente durante este año, tendrá que convivir con el régimen local de patentes. Esto supondrá para cualquier empresario nacional que tendrá que realizar todo el procedimiento de solicitud por partida doble: en inglés ante la OEP y en español ante la Oficina Española de Patentes y Marcas.
Italia, que en principio batalló también por la defensa de su lengua, finalmente tiró la toalla. En medio de esas discusiones diplomáticas se sitúan los realmente interesados: los emprendedores e investigadores españoles. Acostumbrados a tener que defender sus tesis y proyectos en la lengua de Shakespeare en cualquier simposio internacional y en las publicaciones científicas. Ya se han mostrado favorables a esa Patente Unitaria Europea. Este aumento del 3,8% en el registro de ideas comerciales se sitúa además muy por encima de la media general, que ascendió durante el año pasado en un 1,6%, hasta las 279.000 frente a las 274.000 de 2014.
La institución europea interpreta estas cifras como "un indicador de la creciente demanda de protección de las patentes de las empresas en todo el mundo". En su último informe anual de la OEP, muestra también que los cinco principales países de origen de las solicitudes de patentes europeas en 2015 fueron EEUU, Alemania, Japón, Francia y los Países Bajos.
En palabras de Benoît Battistelli, presidente de la OEP, "el notable crecimiento en las solicitudes de patentes en la OEP demuestra que Europa sigue siendo un centro para los innovadores de todo el mundo, y un mercado de tecnología atractiva". "Esto refleja el interés de las empresas y los inventores de optar por la protección de las patentes de alta calidad para el mercado europeo". Y agregó: "A pesar del impresionante crecimiento de las aplicaciones de fuera de Europa, el saldo de la cantidad de solicitudes de patentes realizadas por las empresas europeas en otras regiones sigue siendo claramente positiva, lo que subraya el potencial innovador de la economía europea".
La tecnología médica, lo que más crece
La firma tecnológica Philips se ha aupado esta vez a lo más alto en el listado de empresas por número de solicitudes de patentes registradas. La compañía holandesa es seguida por dos surcoreanas -Samsung y LG- y una china -Huawei-. En la quinta posición destaca Siemens, que es una de las responsables de que las aplicaciones tecnológicas médicas sean un año más el campo con mayor número de solicitudes. En concreto, crecieron un 11% con respecto a 2014. Otras áreas que mostraron un crecimiento significativo fueron Motores, bombas y turbinas (18%), Productos farmacéuticos (10%), Medición (8%) y La tecnología informática (8%).
En cuanto a los sectores que han experimentado en esta ocasión un retroceso podemos citar las de Comunicación digital, que cayeron un 12%, Biotecnología (6%) y Máquinas, aparatos y energía (5%). No obstante, las empresas europeas están detrás de ocho de cada diez propuestas presentadas en los diez campos técnicos más destacados. De esta manera, hay que señalar que sólo Tecnología médica y La tecnología informática fueron dominadas por las empresas estadounidenses.
Más patentes por habitante
El número de solicitudes de patentes sigue siendo un buen termómetro para medir el nivel de innovación de un país. Si nos detenemos en un dato que compara el número de patenes ante la OEP con el número de habitantes, Suiza se llevaría el título de nación más innovadora. El país alpino volvió a repetir en esa posición en 2015 con 873 solicitudes por millón de habitantes. En este mismo ranking, el segundo y el tercer puestos fueron para los Países Bajos (419) y Suecia (392), seguida de Finlandia (365) y Dinamarca (346). El primer país no europeo fue de nuevo Japón, en el noveno lugar (169).
La Oficina Europea de Patentes ha aprovechado la reciente presentación de su informe Anual de 2015 para sacar pecho y mostrar los avances que está llevando a cabo para modernizar su estructura interna y ser más eficientes: "La OEP ha publicado más de 68.000 patentes concedidas, con un incremento de casi el 6% con respecto a 2014, alcanzando el número más alto de su historia. Nuestro proceso de concesión sigue siendo muy riguroso, con sólo el 48% de las solicitudes presentadas convertirse en una patente europea".