
Ni Córdoba ni Toledo: el puente romano más largo y mejor conservado del mundo está en España y tiene más de 2000 años de antigüedad
Si hablamos de puentes y calzadas, es normal que nuestra mente se traslade inmediatamente a la época del Imperio Romano. Y es que, a pesar de que hayan pasado ya más de 2000 años, su huella todavía sigue presente en una larga lista de ciudades. Ahora bien, aunque es cierto que Roma fue sin lugar a dudas el núcleo de su imperio, en España podemos gozar de tener algunos de los mejores monumentos. Sin ir más lejos, el puente romano más largo del mundo y mejor conservado se encuentra aquí, sobre las aguas del río Guadiana.
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1. En una ciudad Patrimonio de la Humanidad
Estamos hablando de Mérida, una de las ciudades españolas más bonitas. Aquí, prácticamente cada rincón es una joya única. En 1993 fue declarada Patrimonio de la Humanidad, y la verdad es que sobran las razones, pues podría decirse que es como un museo al aire libre.
Más allá del puente, hay otras huellas de los romanos que podemos seguir visitando, como el Teatro, que acoge aún representaciones clásicas, el Anfiteatro o el Acueducto de los Milagros. Incluso, hay hasta una Alcazaba árabe.

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2. Con una longitud de 800 metros
Con 60 arcos de medio punto y 800 metros de largo, el puente romano de Mérida es el más largo del mundo. Por supuesto, pasar por aquí es mucho más que cruzar un río, es comprobar como el trabajo que hizo el Imperio era prácticamente un milagro de la ingeniería.

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3. Más de 2000 años y en funcionamiento
Podría decirse que pasear por aquí es prácticamente como viajar al pasado, porque sí, lleva en pie más de 2000 años. Ha sobrevivido a guerras, desastres naturales y muchos muchos cambios, pero todavía es posible apreciar 60 de sus 62 arcos.
Prácticamente el secreto de que este puente siga firme es gracias a sus tajamares, unas piezas puntiagudas que cortan la corriente y su estructura modular.

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4. Un paseo peatonal histórico
Afortunadamente, desde el año 1991 ya no pasan coches por aquí, por lo que se ha convertido en uno de los paseos más bonitos que se pueden realizar tanto en Mérida, como en España.
Cruzarlo con el sonido del agua y al atardecer es una experiencia única que te recomendamos no perderte.