Cómo preparar gelatina rica en colágeno: la alternativa perfecta al caldo de huesos con solo tres ingredientes
A la hora de hablar de colágeno, lo primero que se nos viene a la cabeza es un buen caldo de huesos, no obstante, hay otras formas de poder consumirlo. Una de ellas es a través de la gelatina. Además de ser muy fácil de preparar, posee un ingrediente llamado grenetina, que se trata de un derivado de los huevos y los cartílagos, por lo que proporciona una importante cantidad de colágeno al cuerpo.
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1. Una alternativa refrescante al tradicional caldo de huesos
Sin duda, una opción ideal sobre todo para cuando no disponemos de tanto tiempo, necesitamos algo más sencillo o simplemente no queremos complicarnos mucho en la cocina. Además, es refrescante, que es lo que ya nos va pidiendo el cuerpo con la llegada de la primavera a la vuelta de la esquina.
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2. Versátil y saludable
El colágeno se trata de una proteína esencial que compone gran parte de los tejidos del cuerpo humano, incluyendo la piel, huesos, músculos y articulaciones. Conforme van pasando los años, su producción va disminuyendo, sobre todo a partir de los 25-30.
Consumirlo a través de opciones como la gelatina es ideal, ya que ayuda a mantener la elasticidad de la piel, a disminuir las arrugas y fortalecer las articulaciones.
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3. El ingrediente estrella
Además, esta gelatina tiene un ingrediente estrella que es el encargado de aportarle un sabor ácido diferente y una serie de beneficios extra.
Las flores de hibisco secas son ricas en antioxidantes, por lo que contribuye a la eliminación de la inflamación. Además, también son conocidas como remedio contra los resfriados, las infecciones urinarias y los dolores estomacales.
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4. El paso a paso
Ingredientes:
- 1 taza de flor de hibisco seca
- 2 ramas de canela
- 2 hojas de laurel
- 4 sobres de gelatina (28 gramos aproximadamente)
- 3 cucharadas de chía en remojo
- Endulzante al gusto
- 1 litro de agua
Preparación:
- En una olla, pon a hervir el agua junto con las flores de hibisco, la canela y el laurel. Cocina a fuego medio durante unos 10 minutos para obtener una infusión concentrada.
- Cuela los ingredientes sólidos y deja enfriar la infusión.
- En un tazón, coloca 4 cucharadas de agua fría e hidrata la gelatina. Deja reposar durante 5 minutos hasta que se esponje. Más tarde, derrítela en el microondas.
- Agrega la gelatina a la infusión y endulza al gusto. Incorpora también las semillas de chía.
- Vierte la mezcla en un molde para gelatina y deja enfriar durante al menos 4 horas.
