
El puré de patatas quedará mucho más cremoso si añades este simple ingrediente que utilizan los chefs franceses
El puré de patatas es todo un clásico de la cocina, pero es en Francia donde realmente se puede considerar un arte. Conocido por ser el acompañamiento perfecto, alegra cualquier plato. Ahora bien, aunque a priori pueda parecer una receta sencilla, la diferencia entre uno bueno y uno malo es más que notable, sobre todo cuando se cocina en grandes cantidades.
Puede quedar muy líquido, grumoso o arenoso, cuando lo ideal es que su textura sea cremosa. Para ello, los chefs franceses guardan un truco bajo la manga y la verdad es que siempre queda perfecto.
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1. El ingrediente estrella
De elevar al máximo el potencial de un buen puré de patatas saben bien en Francia, ya que es de la cocina del país vecino de donde proviene el secreto. Según los expertos, para conseguir que pase de ser un mero acompañamiento, al protagonista del plato, hay que añadir ajo confitado, una absoluta delicia.

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2. Un proceso muy sencillo
Además, confitar ajos es un proceso muy sencillo que se puede hacer en casa. Se prepara cocinando los dientes a fuego lento en aceite de oliva o mantequilla, hasta que queden tiernos y con una textura untuosa. Este proceso suaviza el sabor intenso del ajo y simplemente resalta sus notas más dulces y ahumadas, que combinan a la perfección con el puré.

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3. Ingredientes
La lista de ingredientes es muy corta y además, lo más seguro es que ya tengas todos estos ingredientes por casa, así que es ideal para cualquier momento.
- 1 kg de patatas
- 6 dientes de ajo confitado
- 100 g de mantequilla
- 200 ml de leche caliente
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva virgen extra

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4. El paso a paso
En primer lugar, pela los ajos y colócalos en un cazo pequeño cubierto de aceite de oliva. Cocina hasta que estén tiernos.
A continuación, hierve las patatas con piel en agua con sal hasta que queden suaves. Pélalas cuando todavía estén calientes para evitar que absorban exceso de agua. Tritura las patatas junto con la leche caliente y la mantequilla hasta que quede una masa homogénea.
Por último, añade los ajos confitados al puré y ajusta la sal y la pimienta al gusto