Buitrago, Patones, Chinchón... Estas son las 11 Villas de Madrid para una escapada rural de fin de semana en otoño

1. Patones de Arriba

Patones es un municipio español que se divide en dos: Patones de Arriba y Patones de Abajo. Patones de Arriba se encuentra en un monte envuelto en arbustos de jara y retama, mientras que Patones de Abajo conecta directamente con el bosque y con el río Jarama. 

La magia de Patones de Arriba es la arquitectura de pizarra y el paisaje de montaña que se divisa a lo lejos. Una de las actividades más destacadas es recorrer la senda ecológica de El Barranco que conecta a los dos Patones. Este camino de 750 metros te transporta a un lugar de paz y tranquilidad y, además, te espera una oferta gastronómica con restaurantes rurales e íntimos para saciar el apetito. 

2. Rascafría

La naturaleza y este pueblo son uno. El paraje natural de Rascafría, sumergido en el Valle del Lozoya a los pies de la Sierra de Guadarrama, hacen de este pueblo un auténtico paraíso de la naturaleza y la tranquilidad.

Toda esta belleza llevó a Enrique II a fundar el Monasterio de Santa María del Paular en el siglo XIV. En su interior, podremos encontrar una colección de pinturas de las que se conservan 16 de las 56 pinturas originales. 

3. San Martín de Valdeiglesias

Situado en la Sierra Oeste de Madrid, este pueblo es conocido por su tradición vinícola que se remonta al siglo XII.

En San Martín de Valdeiglesias tendrás la oportunidad de poder visitar diferentes bodegas y probar todos los vinos característicos de la zona. Los vinos de este lugar tienen su propia subdenominación dentro de la D.O. de Vinos de Madrid, por la gran calidad del vino tinto procedente de la uva garnacha y el blanco, elaborado con la uva autóctona. 

Además, si te gustan los paisajes naturales, desde la Torre del Homenaje del histórico castillo de la Coracera podrás contemplar la Sierra de Gredos, los bosques que lo rodean y los embalses de San Juan y de las Picadas. 

4. Torrelaguna

Torrelaguna, un lugar de ilustres personajes como Cardenal Cisneros y Santa María de la Cabeza, se encuentra en la comarca de Sierra Norte a 61 kilómetros de Madrid. 

A lo largo de los años, la economía de este pueblo se ha basado en la explotación agrícola, forestal, en el mantenimiento de varios centros del Canal de Isabel II y en la central eléctrica de Torrelaguna, de ahí a que su población haya aumentado con el paso del tiempo. 

Entre sus arquitecturas más importantes, destaca la iglesia de Santa María Magdalena, el Pósito, el Hospital de San Bartolomé y el Convento de Franciscanos de la Madre de Dios. 

5. Villarejo de Salvanés

Situado entre los ríos Tajo y Tajuña, este pueblo fue construido a partir de una antigua atalaya musulmana.

Nada más llegar a Villarejo de Salvanés, podrás contemplar la impresionante figura de la Torre del Homenaje y aprenderás sobre su historia en la Casa de la Tercia. 

En cuanto a gastronomía se refiere, el pueblo presenta varios enclaves muy económicos donde podrás probar 'el tapeo' y la comida más castiza del lugar. 

6. Buitrago del Lozoya

Buitrago del Lozoya nace del Valle del Lozoya, río que da la bienvenida a los visitantes de este pueblo. La belleza de su paisaje y los productos naturales son la esencia de esta ubicación que te transportará al medievo.

Todo este legado lo dejó Abderramán III a sus espaldas cuando mandó levantar una muralla para reforzar sus fronteras y así evitar incursiones cristianas. Actualmente, esta construcción de 800 metros de recorrido y tres puertas de acceso a su interior se puede visitar.

Uno de los secretos más sorprendentes de este pueblo madrileño alejado de la capital es el Museo Picasso de Buitrago. Un espacio que recoge una colección de sesenta piezas pertenecientes al artista malagueño cuando se encontraba en su exilio francés. 

7. Chinchón

Sin duda, este es pueblo de moda en la capital. La Plaza Mayor de Chinchón conserva la arquitectura castellana popular y en ella ofrecen una de las mejores ofertas gastronómicas y hoteleras de la Comunidad. Cuando se esconde el Sol, la plaza Mayor se ilumina, creando un ambiente cálido donde se detiene el tiempo. 

Si quieres reponer fuerzas y tener el estómago contento, Chinchón es un lugar ideal para disfrutar de un fin de semana con amigos o en pareja. 

8. Colmenar de Oreja

Colmenar de Oreja es un municipio escondido que se sitúa en el sureste de la Comunidad de Madrid. Su casco urbano fue declarado Bien de Interés Cultural y cuentan con museos que explican la historia de este lugar como el Museo de Ulpiano Checa. 

Una actividad obligatoria que presenta este pueblo es visitar sus bodegas centenarias, degustar una buena copa de vino de Denominación de Origen Madrid en su Plaza Mayor y probar su rico queso de oveja y aceite propios de la localidad. 

9. Manzanares el Real

Cuenta con el castillo mejor conservado de la Comunidad de Madrid, el castillo de Manzanares el Real, que se puede visitar al completo. Adentrarse en este lugar te trasladará a un cuento de hadas y príncipes propios de la infancia. 

Manzanares el Real forma parte del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, por lo que podrás disfrutar de sus aguas cristalinas que se encuentran a los pies del pueblo. 

En cuanto a lo gastronómico, podrás degustar de los platos estrella de la zona como son las carnes, asados y cocidos cocinados a fuego lento. 

10. Navalcarnero

El pleno corazón vinícola de Madrid. Es un lugar ideal para disfrutar del vino en su máximo esplendor, con museos, festivales y rutas de catas dedicados puramente al vino. Su Plaza de Segovia, una de las joyas de la corona que esconde Madrid, es un lugar ideal para poder disfrutar de un buen vino de Navalcarnero.

Navalcarnero, además, ofrece otros lugares para visitar como son las cuevas, casas, callejuelas medievales, restaurantes castizos y bosques. Sin duda, este pueblo es una buena opción para desconectar durante unos días.   

11. Nuevo Baztán

Nuevo Baztán nació a principios de 1709 cuando se decide construir el casco antiguo, ya que los obreros de una fábrica de vidrio necesitaban un lugar donde dormir. 

Lo más destacado de este lugar es su monumental palacio-iglesia de estilo barroco y su singular casco histórico. Este impresionante conjunto arquitectónico fue diseñado por el arquitecto español José Benito Churriguera. En el interior de su monumento más característico, podrás observar diferentes figuras y pinturas que se conservan de tiempos atrás.