
Javier Ruiz, Alejandro Martín y Miguel Rodríguez, antiguos gestores de Metagestión, llevan apenas seis meses como gestores de una de las firmas value de más reciente creación: Horos AM, que en menos de un año ha conseguido captar activos por valor de 38 millones de eu-ros. Una tarea nada sencilla, teniendo en cuenta que ni el mercado ni el comportamiento de sus dos fondos, Horos Iberia y Horos Value Internacional (pierden más que sus índices de referencia), han acompañado.
Pero a los gestores no les preocupa este accidentado arranque, a pesar de que en una clara alineación de sus intereses con los de sus inversores reconocen "tener el 100 por cien de nuestro ahorro financiero en nuestros fondos", según afirma Miguel Rodríguez, y eso sin contar con el dinero que invierten sus familias. Al fin y al cabo, según recuerda Javier Ruiz, "no gestionamos pensando si el mercado lo va a hacer bien o mal, o si está caro o barato. La cartera de nuestros fondos está 100 por cien invertida, porque con estas caídas hemos encontrado nuevas oportunidades de inversión", como Ercros o Renta Corporación, ya que son dos de los valores donde han reforzado sus posiciones en las últimas semanas.
Un potencial del 50%
De hecho, calculan que el potencial a tres años de su cartera ibérica está hoy está por encima del 50 por ciento gracias al tirón que defienden que todavía tienen las pequeñas compañías españolas. Un tirón al que, si se cumplen sus pronósticos, pueden sacar ahora más partido que en su etapa en Metagestión ya que, la diferencia fundamental de su trabajo en Horos es que como explica Alejandro Martín "ahora somos algo más pequeños, lo que nos permite poder dar un peso un pelín más alto a aquellas compañías que son más ilíquidas".
De hecho, como puntualiza Mi-guel Rodríguez, "nos gusta concentrar las ideas, históricamente hemos tenido compañías al 10 por ciento, y no tenemos complejos en hacer eso. Tenemos alguna posición en cartera que está al 7-8 por ciento". Eso sí, eso no implica que no den importancia a la liquidez de su cartera. "Tenemos como objetivo que podamos liquidar el 80 por ciento de la cartera con el 30 por ciento del volumen diario que hace el mercado en menos de cinco días", afirma el gestor.
Esta concentración de la cartera y el hecho de que esté casi al 100 por cien invertida en este momento demuestra la convicción de unos gestores por un mercado como el de las small caps al que, además con Mifid II, seguirán ahora muchos menos analistas. "Te generan oportunidades porque son pequeñas, no las cubre el mercado, son ilíquidas, y al final es donde se generan las ineficiencias", afirma Javier Ruiz, justo lo contrario de lo que sucede con mercados mucho más eficientes como el estadounidense, donde está demostrado que la gestión activa ha aportado muy poco valor en el pasado. "En los últimos 20 años, en EEUU, se ha pasado de 7.000 compañías cotizadas a 3.500 y el número de analistas se ha incrementado. Es decir, cada vez hay más ojos y más manos mirando en esos mercados", afirma Martín.
De ahí que en su cartera internacional EEUU pese más bien poco con algunas excepciones muy me-diáticas como la posición que tiene en Alphabet, a pesar de que históricamente el sector tecnológico nunca ha estado en las quinielas de los gestores value más puros. "Si juntas lo que tiene en caja en balance, una valoración conservadora de Youtube, y haces la estimación de cuánto debería ganar de caja en un entorno normalizado, sin tantas inversiones, dentro de 10 años, y te sale que cotiza a 10 veces. Para nosotros es igual de value", defiende Javier Ruiz, quien también reconoce huir de la etiqueta value o growth para definir su estilo de gestión.
Sí se definen como gestores independientes en un momento en el que la industria en España está viviendo un particular boom que, a su juicio, es solo el principio. "Si el 90 por ciento de la gestión está bancarizada, necesitamos más proyectos que lo hagan bien, que eduquen a la gente, y a partir de ahí que estos proyectos puedan ser un sustitutivo a la cuota bancaria. Una vez que el cliente sale del banco a la gestión independiente no vuelve", afirma Miguel Rodríguez.