Las perspectivas de los grandes gestores de fondos del mundo han recuperado el sesgo bajista. Así, la última encuesta mensual realizada por Bank of America Merrill Lynch en julio señala que el 12% de los 202 grandes inversores sondeados creen que la economía global se va a deteriorar en los próximos doce meses, la primera estimación negativa desde febrero de 2009.
Este dato representa un cambio radical desde junio, cuando el 24% de los gestores afirmaban que esperaban que la economía se fortaleciera a un año vista.
Gran parte de este pesimismo tiene que ver con las estimaciones de beneficio de las compañías. Nada menos que un 4% de los expertos espera ya que empeores los resultados corporativos, frente al 28% que en junio predijo que iban a mejorar. También es la primera lectura negativa en más de un año.
Menos apetito por el riesgo
En línea con este sentimiento, el apetito por el riesgo ha caído de forma notable, y cada vez más gestores se mueven hacia el cash y reducen su exposición a las acciones m´s cíclicas. La liquidez ya representa de media un 4,4% de las carteras, por el 4,1% de junio, y el 39% de los expertos afirma estar asumiendo un riesgo por debajo de lo normal.
"La encuesta de julio trae reminiscencias del sentimiento que expresaron los grandes inversores durante la recesión, a principios de 2009", señala Gary Baker, estratega jefe de renta variable europea de BoA Merrill.
Michael Hartnett, estratega jefe de renta variable global de la firma reconoce por su parte que "las expectativas de crecimiento y beneficios han caído con fuerza", si bien afirma que "los activos con más riesgo tendrán un tercer trimestre mucho mejor".
No esperan subidas de tipos
Con la reaparición de las preocupaciones sobre el crecimiento económico, las relativas a la inflación parecen haberse volatilizado.
Así, un 12% de los sondeados espera que la inflación caiga el próximo año, mientras que hace sólo un mes ese mismo porcentaje aseguraba que el coste de la vida repuntaría.
Con todo esto, el 47% de los expertos considera que la Reserva Federal estadounidense (Fed) no subirá los tipos de interés antes de julio de 2011.
Sólo el 24% de los gestores prevé mejoras en la economía