El Gobierno británico está estudiando la posibilidad de conceder ayudas a las filiales de Tata Motors, Jaguar y Land Rover, para hacer frente a la caída de la demanda y a la crisis económica, según ha informado hoy el secretario de Empresas de Reino Unido, Peter Mandelson, que aseguró que el Estado "no tiene una chequera en blanco" financiar a empresas privadas en dificultades.
Mandelson explicó a Sky News que el Gobierno británico está inmerso en conversaciones con dichos fabricantes de automóviles y apuntó que el Ejecutivo "está analizando muy cuidadosamente" lo que va a pasar en un futuro con el sector de la automoción.
El secretario de Empresas afirmó que la matriz de Jaguar y Land Rover, la multinacional india Tata Motors, tiene "la primera responsabilidad" de asegurar la supervivencia de estas dos firmas automovilísticas.