El fabricante japonés de automóviles Nissan recortará su producción en Japón en 78.000 vehículos más desde enero del próximo año, lo que provocará la eliminación de 500 puestos de trabajo eventuales en el primer trimestre de 2009, según ha informado la empresa.
La multinacional que preside Carlos Ghosn justificó esta decisión por la necesidad de reducir los niveles de stock de vehículos para asegurar un suministro de producción adecuado, ante las continuas caídas de las ventas de vehículos en todo el mundo.
"Nissan sigue analizando la volatilidad del mercado automovilístico, al objeto de responder de una forma rápida y efectiva, mediante la aplicación de los correspondientes ajustes de producción", añadió la compañía.