El banco español ha notificado ya oficialmente a Bruselas su intención de adquirir la red de sucursales y los depósitos del banco británico Bradford & Bingley, que ha sido nacionalizado por el Gobierno de Londres para salvarlo de las turbulencias financieras.
Ahora, la Comisión Europea tiene ahora hasta el 17 de diciembre para decidir si autoriza o no la operación.
Una vez transcurrido este plazo, el Ejecutivo comunitario puede aprobar la compra, con o sin condiciones, si considera que no tendrá un impacto negativo sobre la competencia, o bien abrir una investigación en profundidad de 90 días de duración si detecta problemas por excesivos solapamientos entre las actividades de las dos partes.
Santander anunció el pasado 29 de septiembre que comprará la red de sucursales y los depósitos de Bradford & Bingley a través de su filial en Reino Unido, Abbey, por 612 millones de libras esterlinas (772 millones de euros).