La Policía mauritana echó gas lacrimógeno y golpeó a los sindicalistas concentrados el martes en una manifestación contra la junta militar que se hizo con el poder en un golpe de Estado el pasado mes de agosto.
Agentes de policía aporrearon a los sindicalistas que mostraban carteles del presidente derrocado, Sidi Mohamed Ould Cheikh Abdallahi, el primer mandatario del Estado africano elegido libremente. Éste permanece detenido desde que fue apartado del Gobierno el pasado 6 de agosto, cuando intentó cesar a varios jefes militares.
Los manifestantes lanzaron piedras contra las patrullas policiales, que persiguieron a grupos de manifestantes por las calles de la capital mauritana, Nouakchott, irrumpiendo en algunas viviendas privadas en su búsqueda.