Eslovaquia ha pasado su último examen y ha obtenido el acuerdo final de los ministros europeos de Finanzas para adoptar el euro a partir del 1 de enero de 2009.
Los ministros adoptaron además una tasa de conversión definitiva de su moneda fijada en 30,1260 coronas eslovacas por euro. Tras esta nueva ampliación, la eurozona sumará 16 Estados miembros.
Aunque los ministros de Finanzas, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo dieron su luz verde, el Banco Central Europeo expresó "importantes preocupaciones" sobre la elevada inflación en Eslovaquia.