
Desde el debate televisado entre Kennedy y Nixon en 1960, se han producido 26 debates presidenciales con muchos momentos clave para la campaña presidencial, pero según los analistas sólo uno fue realmente un ejemplo sobre cómo estos encuentros pueden darle la vuelta a la contienda de forma semejante: Al Gore contra George W. Bush en el año 2000.
Y no es cuestión de opiniones. Los debates proporcionaron a Bush 12 puntos, según la empresa de sondeos Gallup. Sin ellos nunca hubiera llegado a la Casa Blanca, nunca se habría invadido Irak, no existiría Guantánamo... La historia del mundo cambió en 90 minutos de televisión.