El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha dictaminado este jueves que los tribunales franceses no violaron la ley europea cuando condenaron al inversor multimillonario George Soros por uso de información privilegiada a finales de la década de 1980, según recoge The Wall Street Journal.
El caso se remonta a 1988, cuando Soros invirtió en Société Générale y posteriormente vendió sus acciones para obtener una ganancias. El inversor siempre ha dicho que no se benefició de información privilegiada cuando compró las acciones de la entidad y ha argumentado que las normas francesas sobre información privilegiada del momento eran demasiado vagas para que sea declarado culpable de ningún delito.
El abogado de Soros, Ron soffer, ya ha señalado que su cliente apelará la decisión. "Hay algunas cuestiones importantes que aún deben ser respondidas".
Según la sentencia de 2005 del Tribunal de Apelación de París, Soros ganó más de dos millones de dólares en plusvalías, supuestamente fraudulentas, mediante transacciones con acciones de Société Générale entre septiembre y noviembre de 1988.