Los analistas creen que la deuda emitida por los países emergentes puede disfrutar de un breve momento de esplendor esta semana, en medio del rebote de los mercados globales provocado por el recorte de la tasa de descuento decidido el viernes por la Reserva Federal estadounidense. Una bonanza que sería pasajera, pues la volatilidad volvería a aparecer en el mercado. La decisión de la Fed de reducir lo que se cobra a los bancos por los préstamos otorgados directamente por la entidad fue una operación de emergencia destinada a aliviar las preocupaciones sobre el acceso al crédito. Después de una semana de cambios bruscos y algunas operaciones de abandono total del mercado emergente, el Indice Plus de Bonos de Mercados Emergentes de JP Morgan (EMBI+) registró un incremento de unos 30 puntos básicos en los diferenciales de los rendimientos sobre la renta comparable del Tesoro estadounidense.
