El Tribunal General de la Unión Europea (TUE) ratificó hoy la decisión adoptada en junio de 2007 por el Ejecutivo comunitario de prohibir a la compañía de bajo coste irlandesa Ryanair la compra de su rival Aer Lingus por considerar que tendría un impacto negativo sobre la competencia en el mercado europeo.
Durante el procedimiento que llevó a esta decisión, Aer Lingus solicitó a la Comisión que ordenase a Ryanair deshacerse de la totalidad de acciones de Aer Lingus que poseía. La Comisión denegó dicha solicitud alegando que no tenía la facultad de ordenar a la aerolínea de bajo coste deshacerse de su participación. También en este caso, el TUE ha dado la razón a Bruselas.
En su sentencia de este martes, el Tribunal General declara que ninguna de las alegaciones presentadas por Ryanair es capaz de desvirtuar los argumentos de Bruselas. tenor de estas afirmaciones, la realización de la concentración obstaculizaría considerablemente la competencia efectiva debido a la creación de una posición dominante en varios mercados desde o hacia Dublín, Cork y Shannon.