El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó este miércoles un crédito para Irak de 3.640 millones de dólares (unos 2.700 millones de euros, con la intención de ayudar al país árabe a reducir sus necesidades financieras acuciadas por la caída de los precios del petróleo y la incertidumbre de las elecciones parlamentarias que se celebrarán el próximo 7 de marzo.
El representante en Irak del organismo económico, Ron Van Rooden, afirmó que el préstamo comprometido ayudará a reducir las carencias de financiación --de casi 5.000 millones de dólares-- hasta finales del año 2011. El FMI desbloqueará inmediatamente un primer paquete de 455 millones de dólares, para ir desembolsando el dinero restante progresivamente.
En rueda de prensa, Van Rooden destacó que las autoridades ven en esta iniciativa una forma de proporcionar a Irak, que ya se beneficia de dos créditos inferiores al millón de dólares cada uno, de un "contexto macroeconómico sólido". Además, esta ayuda debía llegar, a su juicio, sin demora, ya que esperar a la formación de un nuevo Gobierno sería "perder un tiempo valioso".