El Índice de Confianza del Consumidor elaborado por el Instituto de Crédito Oficial (ICO) descendió 1,2 puntos en febrero, hasta situarse en 89,4. Según el ICO, "la confianza descendió en febrero porque empeoró la valoración de los consumidores acerca de la situación actual debido, principalmente, a la peor opinión manifestada en relación a la evolución reciente de su economía familiar". El instituto explica que "este movimiento puede estar relacionado con la elevación de los tipos de interés en el último semestre y con el aumento del precio del petróleo en febrero, que afectan directamente a las posibilidades actuales de consumo de los encuestados". "Sin embargo", continúa, "los buenos datos macroeconómicos publicados recientemente (aceleración del crecimiento del PIB en el cuarto trimestre de 2006, moderación de la inflación, creación de empleo) son coherentes con el avance interanual del indicador parcial de situación actual y pueden haber animado a los consumidores a confiar en la prolongación de la bonanza y a mejorar sus perspectivas de empleo, ahorro y consumo duradero".
