El padre del joven de origen afgano acusado de planear una de las mayores amenazas a la seguridad de Estados Unidos desde el 11 de septiembre se declaró inocente del delito de mentir a las autoridades.
Mohammed Wali Zazi, de 53 años, presentó su declaración de inocencia en una breve vista celebrada en Denver (Colorado), un día después de ser acusado formalmente de mentir a los agentes del FBI que estaban investigando a su hijo, el joven de 24 años Najibulá Zazi.
El joven, conductor de un autobús lanzadera hacia el aeropuerto de Denver, fue acusado el mes pasado por un juzgado de Nueva York de planear atentados con bombas en Estados Unidos. Éste se ha declarado inocente y se encuentra en prisión sin fianza.