Caixanova comunicó hoy su decisión de reorganizar su estructura comercial fuera de la comunidad gallega a través de una dirección de negocio de empresas y otra especializada en el mercado minorista. La entidad gallega dedicará 20 de las 159 oficinas comerciales que posee en el exterior de la comunidad a ofrecer servicios financieros especializados a medianas y grandes empresas.
La caja contará de este modo con 31 oficinas especializas en servicios a empresas y 543 dedicadas al mercado minorista, además de las 13 que posee en otros países europeos -Portugal, Suiza, Alemania, Francia y Reino Unido- y americanos -Estados Unidos, México, Venezuela, Brasil y Argentina-.
El objetivo de la caja es ofrecer un servicio más personalizado a cada cliente en función de sus necesidades, en una estrategia de ampliar la orientación al cliente y diversificar su negocio. Caixanova dispone de una red de 587 oficinas, de las que casi el 30 por ciento están ubicadas fuera de la comunidad gallega.