
El verano es sinónimo de vacaciones, playa, buenas comidas en mejor compañía, pero sobre todo calor. Es por ello que un helado puede ser la mejor solución para combatir las altas temperaturas. Es cierto que no podemos pasarnos el día comiendo helado, pero ¿y si te dijera que hay una receta para hacer tus propios polos proteicos?
No puede ser más sencillo y a la vez barato. Lo único que hay que hacer es comprar en cualquier supermercado una bolsa de fruta congelada (si es la de mango congelado saldrá aún más cremoso) y una tarrina de queso batido.
En una batidora vierte primero la fruta aún congelada y luego el queso, si se quiere también se puede añadir un endulzante natural. Se tritura todo hasta conseguir una textura líquida y se vierte en un taper.
Ya estaría listo. Es el momento de consumirlo bien fresco o, para una mayor consistencia, se puede llevar al congelador y sacar un poco antes de consumir.
La receta está pensada para hacerlo con mango, pero se puede hacer con cualquier bolsa de fruta congelada. Lo único que hay que tener en cuenta es que algunas pueden resultar algo amargas, como normalmente las fresas congeladas, por lo que incorporar algo de miel puede darte un sabor mucho más intenso.
Ingredientes
- Bolsa de fruta congelada
- Tarrina de queso batido
- Miel (opcional)
Relacionados
- El sencillo truco para hacer las patatas perfectas en la airfryer que cada vez más gente copia: quedan perfectas
- La única cueva de origen marino de Europa está en España y es una de las tres que hay en el mundo
- Qué pasa si se te mete crema solar en el ojo y cómo aliviar la molesta irritación
- La deliciosa cena con pesto de pistacho que es perfecta para verano: lista en cinco minutos