
Ya casi está aquí el verano y, junto con el buen tiempo, la opción de disfrutar de una escapada se hace cada vez más atractiva. En España hay muchos lugares perfectos para ello, pueblos con alma propia que destacan por su entorno y su rica herencia cultural. Estos últimos años no solo han destacado los lugares de costa en la temporada estival, sino que cada vez más gente mira hacia el interior.
En el corazón de Toledo se encuentra una de las localidades más bonitas de toda Castilla-La Mancha: Escalona, un lugar que ha permanecido oculta para muchos. Sin embargo, su imponente castillo -con un sistema defensivo único que ahora puede visitarse- ha empezado a llamar la atención.
Bañada por el río Alberche, Escalona es una villa con una historia que se remonta a tiempos prerromanos. Y es que su origen como asentamiento defensivo tiene relación con su ubicación sobre un promontorio natural que domina todo el paisaje.
El núcleo urbano de la localidad se empezó a desarrollar en el periodo musulmán, cuando se fortificó para ser parte de la defensa de Al-Ándalus. Finalmente, en 1083 fue conquistada por Alfonso VI de León y Castilla en su avance a Toledo.
Sin duda el mayor atractivo de Escalona es su castillo-palacio, que hace unos meses abría sus puertas al público tras la compra del Ayuntamiento de este monumento declarado Bien de Interés Cultural.
A su alrededor, todavía pueden apreciarse restos de las murallas y algunas puertas de acceso al antiguo recinto amurallado. Fue inicialmente una fortaleza musulmana, ampliada y transformada en los siglos posteriores. La lujosa residencia palaciega pasó a manos de nobles como Don Álvaro de Luna, que transformó el castillo en un centro de poder en el siglo XV.
El castillo estaba rodeado por una muralla doble con almenas y disponía de un foso natural gracias al cauce del río. Además, en caso de ataque había un puente levadizo que podía destruirse, y si asediaban el lugar contaban con pasadizos secretos y canalizaciones subterráneas para el suministro de agua.
Aunque en parte en ruinas, el castillo sigue siendo una parte importante del paisaje y un símbolo de la villa. La entrada al castillo se realizará mediante su página web o de manera presencial en la Oficina de Turismo por un valor de 3 euros entrada general, 2 euros la reducida para menores de 16 y grupos de 10 personas.