El método perfecto para hacer una pizza casera desde cero, con una masa fácil y un resultado espectacular

Hacer pizza casera está de moda: es barato, divertido, sabroso y mucho más fácil de lo que parece. Anímate a probar y seguro que repetirás. Preparar pizza casera se ha convertido en una de las actividades favoritas en muchos hogares. No solo por lo deliciosa que es, sino también porque hacerla en casa permite personalizarla a gusto, controlar los ingredientes y disfrutar del proceso en familia o con amigos.

Con una masa básica y algunos ingredientes sencillos, puedes preparar una pizza que no tiene nada que envidiar a la de un restaurante. Además, es una opción perfecta para los fines de semana, celebraciones o simplemente para darte un capricho sin salir de casa.

Aquí te explicamos paso a paso cómo hacer una pizza casera desde cero, con una masa fácil y un resultado espectacular.

Ingredientes para la masa (para 2 pizzas medianas)

• 400 g de harina de trigo (mejor si es de fuerza)
• 250 ml de agua templada
• 15 g de levadura fresca o 5 g de levadura seca de panadería
• 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• 1 cucharadita de sal
• 1/2 cucharadita de azúcar

Paso a paso para preparar la pizza casera

1. Activar la levadura.
2. Disuelve la levadura en el agua templada junto con el azúcar. Deja reposar 5-10 minutos hasta que empiece a burbujear.
3. Mezclar la masa.
4. En un bol grande, pon la harina con la sal. Haz un hueco en el centro y añade la mezcla de agua con levadura y el aceite de oliva. Mezcla bien hasta formar una masa.
5. Amasar.
6. Pasa la masa a una superficie enharinada y amasa durante unos 10 minutos, hasta que quede lisa y elástica. Si tienes robot de cocina, puedes usar el gancho de amasado.
7. Dejar reposar.
8. Forma una bola con la masa, colócala en un bol ligeramente aceitado, tápala con un paño y deja reposar en un lugar cálido durante 1-2 horas, hasta que doble su tamaño.
9. Formar la base de la pizza.
10. Cuando la masa haya levado, divídela en dos partes (si haces dos pizzas) y estira con las manos o un rodillo sobre papel de horno, dándole la forma que prefieras.
11. Montar la pizza.
12. Pon una base de tomate triturado o salsa de tomate, añade queso rallado (como mozzarella) y los ingredientes que más te gusten: jamón, champiñones, atún, aceitunas, cebolla, etc.
13. Hornear.
14. Precalienta el horno a 220 ºC con calor arriba y abajo. Hornea la pizza durante 12-15 minutos o hasta que los bordes estén dorados y el queso fundido.

Consejos para una pizza perfecta

• Si quieres una masa más crujiente, puedes hornearla primero unos minutos sin ingredientes y luego terminar de hornear con el relleno.

• Añadir orégano, albahaca o unas gotas de aceite picante al final le da un toque extra de sabor.

• Si tienes piedra para pizza o una bandeja de horno muy caliente, ¡úsala! Mejora mucho el resultado.