Evasión

Esta tarta de pistacho y lima es la más deliciosa y fácil de hacer: en pocos minutos y no hace falta horno

Fuente: Istock

El pistacho ha conquistado nuestras cocinas, nuestros paladares y nuestra gastronomía. Cada vez es más común verlo en la carta de casi todos los establecimientos, ya sea como el protagonista de una tarta, en un café, en forma de crema, en helado o en un croissant. Tanto en España, como a nivel internacional, el 26 de febrero es el Día Mundial del Pistacho, por lo que se podría decir que hoy es la excusa perfecta para darnos un caprichito dulce con sabor a pistacho.

Sin horno y en pocos minutos

No tener mano en la cocina ya no es una excusa para disfrutar de postres deliciosos. Es cierto que está genial ir a un restaurante y probar toda su extensa carta de tartas, helados y bizcochos, pero es todavía mejor la satisfacción al saber que esa tarta la has hecho tú.

Además, a día de hoy se ha comprobado que el horno ya no es un paso imprescindible para realizar todo tipo de recetas. Ahora, hay una gran infinidad que no necesitan de este electrodoméstico y que su mejor aliado es el frigorífico. Además, se trata de una opción de lo más recomendable, sobre todo durante los meses de calor.

Pistacho y lima
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El paso a paso

Ingredientes:

  • 80 g de galletitas saladas
  • 80 g de pistachos
  • 80 g de mantequilla
  • 250 g de queso crema
  • 250 g de leche condensada
  • 150 ml de nata para montar
  • 150 ml de zumo de lima
  • Ralladura de dos limas
  • 1 cucharadita de azúcar
  1. Tritura las galletas junto con los pistachos, la mantequilla y la cucharadita de azúcar. La mezcla debe quedarte homogénea.
  2. Con la mezcla de galletas cubre el fondo del molde de la tarta y aplasta hasta que quede bien compacto. Después, refrigera en la nevera.
  3. Llegados este momento, bate la leche condensada y el queso crema durante cinco minutos hasta conseguir una crema ligera.
  4. Añade el zumo de lima y la ralladura a la mezcla y sigue batiendo durante un par de minutos más.
  5. Mientras, en otro bol, bate la nata hasta que quede bien montada. Después, incorpórala a la mezcla de queso con movimientos envolventes.
  6. Saca la base de la tarta de la nevera y vierte con cuidado el relleno. Por último, déjala reposar en la nevera.
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