
Los gobiernos locales y regionales en la primera línea de la crisis del Covid-19 han recurrido a las tecnologías digitales para monitorear, anticipar e influir en la propagación de la enfermedad.
La pandemia sanitaria ha acelerado los procesos de digitalización de nuestros sectores productivos. En tan solo unos meses, el coronavirus ha traído años de cambios en la forma en que las empresas hacen negocios. Según una encuesta global de ejecutivos de McKinsey, sus empresas han acelerado la digitalización de sus interacciones con los clientes y la cadena de suministro y de sus operaciones internas entre tres y cuatro años. Y la proporción de productos digitales o habilitados digitalmente en sus carteras se ha acelerado en siete años.
La educación también ha entrado en el terreno de juego y está sabiendo adaptarse a los nuevos retos. Los grados "tradicionales" están dando paso a que las empresas ofrecen capacitación enfocada en habilidades sociales, habilidades básicas, pensamiento crítico o una oportunidad para establecer contactos.
Las opciones profesionales orientadas al retorno de la inversión y el cambio al aprendizaje permanente impulsarán nuevos modelos comerciales en la educación. Asimismo, el contacto de persona a persona, así como la inteligencia artificial, serán esenciales para el futuro de la educación. Hoy, las nuevas tecnologías prometen facilitar y acelerar el aprendizaje de los estudiantes.
El contacto de persona a persona, así como la inteligencia artificial, serán esenciales para el futuro de la educación
Lo que parece seguro es que la industria de las tecnologías de la información cambiará profundamente con la crisis. Está forzando un replanteamiento total de lo que se necesitará para adaptarse a las necesidades de tecnología empresarial a medida que avanzamos desde la situación actual. Mantener la competitividad en este nuevo entorno empresarial y económico requiere nuevas estrategias y prácticas. Por ejemplo, antes de la crisis del coronavirus, las empresas habían ido trasladando gradualmente las cargas de trabajo informático del hardware local a la nube. Aún así, a pesar de todo el progreso que se había logrado, la mayoría de las empresas solo habían trasladado alrededor del 20% de sus cargas de trabajo a la nube, y el 80% restante permanecía dentro de las soluciones heredadas locales, según el estudio de McKinsey. No hace falta decir que eso ha obstaculizado la capacidad de muchas organizaciones para reasignar recursos para apoyar a los trabajadores que no se ven obligados a trabajar fuera de sus oficinas.
Según los datos proporcionados por Microsoft, durante la crisis de Covid-19 hubo un aumento del 775% en la demanda de sus servicios en la nube. Y esta tendencia alcista no parece detenerse aquí, ya que todo apunta a que este tipo de tecnología seguirá creciendo en cualquier tipo de aplicación, y será un actor importante en la era post-Covid.

Durante la pandemia, los consumidores han preferido utilizar los canales en línea y las empresas y las industrias han respondido a su vez. Esto demuestra el rápido cambio hacia la interacción con los clientes a través de canales digitales y el leitmotiv de que las empresas con negocios digitales sólidos son las que tendrán éxito.
Además, a medida que el trabajo remoto se convierte en la nueva normalidad, la realidad virtual y la realidad aumentada serán áreas de crecimiento que proporcionará nuevas y mejores interfaces para softwares de trabajo en equipo, así como para conferencias web.
El teletrabajo, fue esa asignatura pendiente hasta la pandemia para muchas empresas en nuestro país, independientemente de su tamaño o ubicación. Hoy, el número de empresas que ofrecen esta opción se ha multiplicado por ocho en solo 10 meses. De hecho, a principios de año apenas un 5% de las compañías ofrecía la opción a sus empleados de trabajar desde casa en nuestro país.

Sin embargo, ahora cerca del 40% de las empresas sí lo hace, según cifras extraídas de un análisis llevado a cabo por Sesame Time, la aplicación de control horario. Así, por ejemplo, cabe destacar los puntos calientes del teletrabajo en España. Las ciudades con mayor adopción al teletrabajo durante los últimos meses coinciden en gran medida con las más expuestas a la crisis sanitaria: Madrid, seguida por Barcelona y en tercer lugar Logroño, Pamplona y Vitoria-Gastei. En el extremo opuesto se encuentran: Mérida y Toledo.
Asimismo, otras tecnologías de vanguardia, como inteligencia artificial, computación cuántica y robótica entrarán de forma más profunda en el terreno de juego.
No obstante, hay que estar alerta en todo momento. El océano azul se puede volver rojo de forma inmediata, donde los competidores copien el modelo y los peces más rápidos se coman a los menos adaptativos. Así, con el rápido ritmo del cambio tecnológico, lo que puede ser impactante hoy será reemplazado por algo más impactante en un año.
Es necesario crear equipos ágiles y flexibles para adaptarse a los cambios rápidos y brindarles las herramientas para desarrollar habilidades y aprender nuevas tecnologías
Lo más importante es continuar siguiendo las tendencias de las nuevas tecnologías a medida que llegan al mercado, crear equipos que sean lo suficientemente ágiles y flexibles para adaptarse a los cambios rápidos y brindarles las herramientas para desarrollar habilidades y aprender nuevas tecnologías a medida que avanzan el mercado.