
Este nuevo mundo genera un gran interés dentro del sector tecnológico y avecina cambios importantes en el funcionamiento del mercado digital. Se presenta como un entorno digital que ofrece a las empresas una infinidad de posibilidades para conectar con su público.
El metaverso es un concepto que se encuentra muy presente en la actualidad. Se trata sobre ello en el sector financiero, en el tecnológico, en el publicitario, en el de videojuegos y, sin exagerar, en la mayoría de los sectores que cuentan con cierto nivel de digitalización.
Pero, para empezar y poder comprender bien cómo funciona, vamos a hacer una breve definición de este concepto que tanto interesa a las compañías tecnológicas de todo el mundo. El metaverso es, en resumen, un espacio virtual al que puedes conectarte usando un avatar e interactuar con otros usuarios/avatares. Puedes comunicarte con ellos, jugar y explorar juntos, entre otras cosas, ya que este nuevo mundo ofrece infinidad de nuevas posibilidades. Es posible que en un futuro próximo podamos conectarnos a este mundo utilizando gafas de realidad virtual y otros complementos que nos permitan interactuar completamente con el entorno y todos sus elementos, haciéndonos creer que estamos realmente en él.
Una de las ventajas de este entorno digital es que puedes conectarte prácticamente desde cualquier lugar, sólo necesitas un dispositivo inteligente (smartphone, ordenador, tablet...) y una conexión a internet para poder hacerlo. "Los mundos virtuales van a coger fuerza en los próximos años. El potencial de este sector es increíble" asegura Miguel Carretero, responsable de FI Invest, consultora especializada en el asesoramiento a empresas en la gestión de la financiación de la I+D+i.
Es cierto que los mundos virtuales no son ninguna novedad, puesto que ya existían, por ejemplo, en el mundo de los videojuegos. Puedes crearte un personaje y personalizarlo, para posteriormente interactuar con el entorno y otros personajes, y vivir un mundo de aventuras. Pero, en este caso, el metaverso no quiere crear un mundo de fantasía y ficción sino crear una realidad alternativa en la que podamos hacer lo mismo que hacemos en nuestro día a día, pero virtualmente.
Tecnología en fase inicial
Como en cualquier tecnología o mercado emergente, la fase inicial es la que más oportunidades de negocio ofrece y, por consiguiente, la fase que más interés genera entre los inversores.
Además, si unimos esta novedad a la creciente fiebre de las criptomonedas y el surgimiento de numerosos proyectos tecnológicos que basan su desarrollo en la existencia de mundos virtuales interactivos, observamos como ha aumentado notablemente el interés de las compañías por este tipo de tecnología y por el futuro mercado que podría surgir de esta.
Una de las formas más sencillas de generar beneficios en el metaverso es a través de la compra de espacios virtuales. Estos espacios se pueden personalizar, por lo que es posible venderlos para incluir publicidad de empresas en ellos, mostrar colecciones en venta de NFT o alquilar esa parcela a terceros para que puedan personalizarla a su gusto.
Interés de las grandes tecnológicas
El final del año pasado y el principio de este han sido, posiblemente, los momentos más disruptivos de este sector hasta la fecha. Por un lado, el gigante de la comunicación y las rede sociales cambió el nombre de su compañía matriz, y pasó de llamarse Facebook a llamarse Meta, siguiendo con la decisión estratégica tomada el año pasado de centrarse en los espacios que unan la actividad real y la virtual.
Por otro lado, Microsoft, otro de los pesos pesados de la industria tecnológica, no quiere quedarse atrás en la carrera por el desarrollo del metaverso. Para ello, ha anunciado la adquisición de una de las compañías de videojuegos más grande del planeta, Activision Blizzard que cuenta con videojuegos como Candy Crush, Call of Duty o Warcraft, conocidos a nivel mundial y con millones de jugadores.
Para hacerse con la famosa marca de videojuegos, la compañía fundada por Bill Gates hará un desembolso de aproximadamente 70.000 millones de dólares, la compra más grande jamás efectuada por esta compañía, que a su vez es la mayor que se ha llevado a cabo en el sector de los videojuegos.
Las compañías que están invirtiendo en el metaverso esperan que este pueda ofrecer las mismas oportunidades, o más, que el mundo físico real, pudiendo crear nuestros propios negocios en él. Evidentemente, la esperanza de todas las compañías es que el metaverso que se imponga sea el suyo, ya que cada una de ellas desarrollará y propondrá el suyo propio. Ya que la que consiga desarrollar e implantar su metaverso será la que controle y se beneficie de todo lo que se genere en él. También se espera que el metaverso esté repleto de micropagos, como los presentes en la mayoría de aplicaciones de móvil actuales. Por ejemplo, pagar por irte de compras virtuales para cambiar el aspecto de tu avatar, exactamente de la misma manera que pagamos cuando nos vamos a comprar ropa para nosotros.
Son muchas marcas las que han explorado las posibilidades de este espacio: Nike, Adidas, Netflix, Lego, Gucci...
El aterrizaje de la publicidad
El metaverso ofrece un número abismal de nuevas posibilidades a la socialización. En definitiva, se trata de un entorno en el que conviven e interactúan usuarios, que se pueden identificar y clasificar de diversas maneras, por ejemplo, por intereses comunes. Es decir, se posiciona como una alternativa más para las marcas donde lanzar sus mensajes y poder conectar con el público.
En esta línea, Nike, la famosa compañía de ropa deportiva de Oregón, está en proceso de registrar diferentes modelos de zapatillas y prendas de vestir virtuales con su marca, para poder comercializarlos en el futuro.
Adidas, por su parte, ha anunciado una alianza con el metaverso Sandbox, soportado por la famosa criptomoneda ethereum. La marca alemana no ha querido dar más detalles sobre esta asociación, pero se suma a la tendencia creciente de las marcas por aparecer en estos mundos. Roblox, un metaverso de moda entre niños y jóvenes, tiene cada vez más presencia de marcas que quieren dirigirse a este público y posicionarse en ese mundo. Por ejemplo, Gucci y Vans se están posicionando como referentes de moda virtual gracias a este metaverso.
Otra de las industrias que también ha decidido invertir en el metaverso es la industria musical. Por ejemplo, en el famoso videojuego Fortnite, dónde los jugadores combaten entre sí para nombrar a un único vencedor, es habitual ver eventos musicales que se desarrollan dentro de su metaverso. El rapero Travis Scott, la cantante Ariana Grande o el DJ Marshmellow son alguno de los artistas que han realizado conciertos a los que solo podías asistir a través de este videojuego.
El fenómeno 'Animal Crossing'
Un claro ejemplo del interés que generan estos mundos virtuales entre los anunciantes es el Animal Crossing, videojuego basado en un metaverso y que recrea un universo en el que se puede tener una isla personal en la que el avatar del jugador debe realizar actividades e interactuar con otros usuarios para alcanzar determinados objetivos.
Desde su lanzamiento, a mediados de marzo de 2020, numerosas marcas y empresas han comenzado a utilizarlo en sus estrategias de comunicación y como nexo con su público. Las primeras en irrumpir en este juego fueron las marcas de moda, siendo la pionera la marca Nook Street Market, a la cual siguieron marcas como Dools Kill, Hihgsnobiety, GCDS, Tombogo, Sandy Ling, Valentino, Marc Jacobs, Anna Sui, Ben Sherman, Betsey Johnson y Givenchy, entre otras grandes marcas textiles.
Este videojuego no solo generó interés entre las marcas de ropa, las empresas de bebidas y alimentos también se han visto interesadas. Hellmann's, la famosa marca de salsas, llevó a cabo una colecta virtual de alimentos que posteriormente transformaron en donaciones reales a ONG's; y la filial filipina de KFC ha activado en varias ocasiones una isla que emula uno de sus emblemáticos establecimientos y tiene representados el logo y la imagen de la marca, el Coronel Sanders.
Son muchísimas las marcas que han explorado las posibilidades que ofrece el metaverso de este videojuego, por ejemplo, Adult Swim, Gillete, Netflix, Dream Works o Lego, se han atrevido creando vestimentas para avatares, generando decoración específica o desarrollando islas personalizadas.
Este fenómeno tambien afectó a las marcas política y atrajo el interés del Partido Demócrata de los Estados Unidos para reforzar la marca personal de sus candidatos. Primero, con la participación en un cara a cara con la congresista Alexandria Ocasio-Cortez y, luego, creando una isla exclusivamente para el candidato presidencial Joe Biden.
Con la aparición del metaverso, podemos decir sin miedo que las empresas y las marcas cuentan con un nuevo espacio, una alternativa a los medios tradicionales, en el que poder llevar a cabo sus estrategias de comunicación y conectar con las nuevas generaciones y, por consiguiente, es más que probable que la inversión en estos espacios tengan cada vez más peso en los presupuestos dedicados a comunicación de las grandes empresas.