
Las escuelas de negocio son las instituciones educativas que más rápido se han adaptado a las necesidades de la sociedad. Por un lado, porque han visto de cerca las necesidades del mercado laboral y han diseñado programas ad hoc para afrontar las necesidades reales de un entorno laboral en constante cambio; por otro, porque han sabido captar las expectativas digitales que tienen los estudiantes y que necesitan ver reflejadas en su entorno educativo.
Sin embargo, a pesar de que la crisis sanitaria también traerá consigo cambios estructurales en las escuelas de negocios y los métodos educativos, pero el futuro no girará entorno al 100% digital. Los centros educativos de formación de ejecutivos han encontrado una manera de integrar lo mejor de los dos ambientes: la metodología híbrida que combina lo mejor de la formación presencial con lo mejor de la formación online proporcionando al estudiante una experiencia educativa única.
De esta manera, y durante los meses más complicados para la ciudadanía española, las escuelas han sabido adaptarse a los nuevos formatos porque ya habían implementado procesos de digitalización. Por tanto, la pandemia lo que ha hecho ha sido dar una sacudida a los cimientos de las operaciones y la enseñanza, pero lo que es más importante, las escuelas han reevaluado el núcleo de sus misiones, han restablecido las relaciones con los entornos globales y locales, han reajustado su enfoque hacia sus partes clave y han redefinido sus objetivos en los modelos de negocio.
Nuevas metodologías
"Todo cambio implica una oportunidad y la pandemia ha sido un factor acelerador de la digitalización, tanto en cuanto a la propuesta metodológica mediante la incorporación de un mayor número de programas en diversos formatos híbridos, como en cuanto a la mayor incorporación de tecnologías digitales en las aulas para flexibilizar la asistencia", explica Joaquín Azcue, Vicedecano de EAE Business School.
Del mismo modo, desde Esade Business School señalan como a través de la hibridación y la combinación de distintas metodologías previamente desarrolladas, han podido seguir garantizando el aprendizaje del alumno además de potenciar su formación en aquellas competencias que demanda este nuevo entorno para gestionar y liderar de manera efectiva en entornos inciertos y complejos.
Asimismo, su decano Josep Franch, considera que el coronavirus no ha frenado la demanda de formación, "al contrario, la ha potenciado. Los profesionales de diferentes partes del mundo son conscientes de que ahora es más necesario que nunca la actualización de conocimientos y competencias".
Ahora es más necesario que nunca actualizar conocimientos y competencias
Por su parte, en ESIC han apostado por un nuevo modelo docente que denominan Transformative Learning que basándose en el método Student Centered Learning convierte al alumno en centro de su aprendizaje de una manera autónoma con el objetivo de desarrollar un pensamiento crítico para la toma de decisiones. La implantación del modelo significa el desarrollo de los programas en un formato híbrido, donde el alumno desarrolla un trabajo de autoestudio de forma asíncrona, mientras que las sesiones de práctica y thought leadership son presenciales, siendo el alumno quien elige consumirlas en aula o en remoto según sus necesidades o preferencias, "aunque en ESIC recomendamos firmemente la asistencia al aula No obstante, en cualquiera de las dos opciones, el alumno participa en la misma clase y experiencia", apunta Antonio Martín Herreros, Decano del Área de Postgrado de ESIC.
Desde IESE su objetivo pasa por poner la tecnología a disposición de su método de enseñanza: El método el caso; una enseñanza basada en el estudio y posterior discusión de casos empresariales reales. De esta forma, a diferencia de las conferencias magistrales en las que el alumno recibe de forma pasiva el conocimiento impartido por los profesores, en el IESE son los alumnos quienes aportan principalmente sus ideas en clases orientadas a la acción. Es por ello, que Edi Soler, profesor del IESE, considera que "IESE no se va a transformar en una escuela online, ya que para llevar a cabo el método el caso, el participante tiene que estar en clase y discutir sus ideas", señala.
Digitalización
Y es que, según la 8ª edición del Barómetro Digital que presentaron el pasado mes de febrero la escuela de negocios digital ISDI y la Asociación Española de Anunciantes, que más del 60% de las compañías ya cuentan con un plan estratégico de digitalización y el 50% de las empresas incluye la capacitación digital en sus planes de formación.
Así, en el plano académico, EAE Business School ha incorporado a los temarios elementos específicos que son especialmente relevantes en la era digital. "Hace ya años que se han incorporado programas enfocados a las nuevas tecnologías: big data, marketing digital, e incluso en cuanto a las habilidades personales, como por ejemplo la capacidad de oratoria online", apunta Joaquín Azcue.
En Esade han diseñado distintos itinerarios formativos que permiten al estudiante adquirir los conocimientos y las habilidades necesarias para desenvolverse y liderar equipos en contextos marcadamente tecnológicos, multidisciplinares, de gran diversidad cultural. "Nuestro reto es el de formar a profesionales para el presente, pero también para el futuro, ya que estamos ante una nueva realidad incierta pero llena de oportunidades de empleo", destacan.
Lo que está claro es que la pandemia, combinada con el crecimiento tecnológico exponencial continuo (y el desplazamiento laboral que la acompaña) y la desigualdad de ingresos, solo acelerará una disrupción sin precedentes en industrias, carreras, trabajos y vidas.
Por tanto, la digitalización impactará en las nuevas profesiones tal y como destaca Valentín Bote, director de Randstad Research: "El mercado laboral no se puede entender en estos momentos sin la influencia de la tecnología. Desde Randstad, consideramos que la mejor inversión que podemos llevar a cabo, en especial en esta situación, es la de mejorar la empleabilidad de los profesionales, desarrollando las competencias y habilidades que más demanda el mercado laboral, entre las que tienen un papel predominante todas aquellas relacionadas con el mundo digital".
Formaciones demandadas
Si antes de la pandemia la formación resultaba imprescindible para conseguir y mantener un puesto de trabajo, ahora mucho más. A las innovaciones tecnológicas, los cambios demográficos, el cambio climático y la globalización, se suma un nuevo desafío global: la crisis sanitaria y económica provocada por el coronavirus.
En esta línea, Josep Franch apunta que los títulos de grado, postgrado y formación ejecutiva más demandados son aquellos que permiten al alumno adquirir los conocimientos y las habilidades para desarrollarse en ese entorno en constante transformación marcado por la globalización, que exige la capacidad de trabajar con equipos diversos y multiculturales; la digitalización, que precisa de expertos en ciencia de datos e inteligencia artificial aplicada a los negocios, y cada vez más comprometidos con desarrollo sostenible.
Por su parte, desde IESE destacan su MBA, con más de 700 alumnos, que se ha consolidado entre los mejores del mundo según los últimos rankings. En concreto, el Financial Times sitúa el programa MBA del IESE en el número 4 del mundo, y The Economist lo sitúa en el número 1 del mundo.
Así, el reto de las escuelas de negocio pasa por la evolución de todos sus programas para incorporar aquellos elementos relacionados con la tecnología que están revolucionando todos los ámbitos de la sociedad. "Es importante destacar que los programas con mayor demanda son aquellos directamente relacionados con la utilización de las nuevas tecnologías digitales. Programas master en Big Data, master en Data Science & Analytics, master en Marketing Digital, Master en Customer Experience & Innovation, entre otros, tienen una gran demanda", explica el vicedecano de EAE Business School.
En definitiva, la propuesta de valor de las escuelas de negocio se apoya en la metodología docente, basada en el aprendizaje experiencial, la flexibilidad para adaptarse a entornos de cambio, la relación con el mercado laboral, y su capacidad de networking.